Presentador:
Señoras y señores tengan todas y todos muy buenos días, bienvenidos al
Salón Ayacucho del Palacio de Miraflores, al acto Ducentésimo vigésimo
noveno aniversario del natalicio del Libertador y Padre de la Patria
Simón Bolívar.
Palabras a cargo del ciudadano Elías Jaua Milano, vicepresidente ejecutivo de la República Bolivariana de Venezuela.
—(aplausos)
Elías Jaua:
Buenos días comandante Presidente de la República Bolivariana de
Venezuela, Hugo Chávez, a los jefes de los poderes públicos, y a todo el
equipo de investigación que participó del proceso de identificación,
reconstrucción facial y preservación de los estos del Libertador Simón
Bolívar. Igualmente a los niños y niñas presentes en este día tan
bonito, histórico y memorable para todos nosotros.
El
3 de marzo de 1947 el poeta revolucionario Andrés Eloy Blanco,
presidente de la Asamblea Constituyente, y de la comisión designada para
verificar la identidad de los estos del Libertador, tomando como base
la denuncia del doctor “Pepe” Izquierdo, expresado en su informe ante el
cuerpo constituyente, las razones por la cual se hizo la investigación
en aquel entonces, cito: “Por otra parte no puedo yo desconocer la
fuerza de las argumentaciones históricas, y la fuerza de las
argumentaciones técnicas que negaban probabilidades a aquella pieza
anatómica de pertenecer al esqueleto del Libertador.” Cierro la cita.
A
pesar de que aquella comisión no abrió la urna de plomo, concluyó que
allí se encontraban los restos óseos de Simón Bolívar, obviamente que
las dudas persistieron, como lo deja entrever el propio Andrés Eloy,
cito:”No soy médico, ni historiador, ustedes saben que para mí esa base
del cráneo lo mismo puede ser del Libertador que de Juana Bolívar, que
de Josefa Tinoco, y aun del general Pedro Briceño Méndez, pariente de la
familia Bolívar.” Cierro la cita.
La
llegada huracanada de la Revolución Bolivariana en la década de los 90
encendió nuevamente la pasión de nuestro pueblo por nuestro Bolívar, y
en medio del fragor de esta contienda por la independencia nacional que
lideriza el comandante Presidente Hugo Chávez, y siendo él un enamorado,
estudioso de la vida y obra de nuestro Padre, puso nuevamente en el
tapete la duda razonable que expresaba el poeta en 1947. Pero fue más
allá, planteó una hipótesis audaz, como audaz es el accionar de vida del
comandante Chávez: Bolívar fue asesinado.
El
17 de diciembre de 2007 el Presidente de la República Bolivariana de
Venezuela, comandante Chávez anunció al país la intención de iniciar una
investigación que verificara la duda histórica de que los restos que se
honran en el Panteón Nacional, son efectivamente los del Libertador
Simón Bolívar, se profundizara en las causas de la muerte, y se tomaran
las acciones para la preservación de los restos mortales del Libertador.
Durante
dos años y medio la comisión presidencial creada para tal fin el 24 de
enero de 2008, realizó los estudios históricos pertinentes, y preparó
las condiciones científicas para la apertura del sarcófago y de la urna
de plomo que contenían los restos mortales.
El
30 de junio de 2010 se hizo la apertura del sarcófago, para explorar el
proceso posterior en el que se abriría la urna de plomo.
El
comandante presidente Hugo Chávez en uso de sus atribuciones autorizó
que el día 15 de julio de 2010 se llevara a cabo la exhumación de los
restos del Libertador Simón Bolívar, y así procedimos, documentados en
serio por el canal Vive TV, a partir de hoy el pueblo venezolano podrá
ver a través del Sistema Nacional de Medios Públicos todo el
procedimiento científico realizado, igualmente los hallazgos sobre la
camisa del Libertador Simón Bolívar, sus botas y otras prendas
encontradas, son expuestas. Tanto la urna de plomo como el antiguo
sarcófago son expuestos en el Museo Bolivariano desde el año pasado.
En
mi condición de presidente de la comisión, informé al comandante
Presidente de la República Bolivariana de Venezuela y a nuestro pueblo
el 25 de julio de 2011, una vez hecha las verificaciones genéticas,
antropológicas e históricas, la conclusión de esta comisión, de que la
estructura ósea que reposa en el Panteón Nacional pertenecen, sin
ninguna duda, a nuestro Padre Simón Bolívar.
—Aplausos.
Necesario
es reconocer el celoso trabajo realizado por el doctor José María
Vargas en 1842 para garantizar que los restos pudieran ser observador
como nosotros pudimos encontrarlo.
Hoy
24 de Julio de 2012 rendimos cuenta de los avances en la investigación
sobre las causas de la muerte, y entregamos un trabajo adicional que
resultó del inventivo y pasión de un grupo de las y los investigadores,
la imagen de la reconstrucción facial en tercera dimensión, del rostro
de Simón Bolívar.
Necesario
es reconocer la ética, el profesionalismo, la pasión patria de todos y
todas, los científicos, técnicos y personal de apoyo que hicieron
posible estos resultados. De manera especial quiero resaltar la labor de
una joven profesional bolivariana, Carmen Romero, secretaria de la
comisión, quien actuó como engranaje de este brillante equipo de
venezolanos y venezolanas, con el apoyo de especialistas
internacionales.
—(aplausos)
Igualmente
reivindicar la audacia y la valentía política del Presidente Chávez, de
realizar esta necesaria investigación, a la cual se oponía y se opone
la moralina de los historiadores y políticos burgueses, no hay duda
tampoco, siguen teniéndole miedo a Bolívar y a su pensamiento
revolucionario.
—Aplausos.
Para
concluir quiero citar nuevamente a Andrés Eloy Blanco en su
intervención del 3 de marzo de 1947, en la cual nos sentimos recogidos y
reivindicados todos y todas los que participamos de esta investigación.
Cito: “Y algún día también habrá ocasión de trasladar esos restos, que
ya no tenemos ningún temor de que los abran, porque por profanación es
intención profana, y esa sería intención glorificadora del culto
nacional.
—Aplausos.
Ya
no tenemos ese temor que teníamos de poder algún día encontrar hecho
polvo del cráneo de Bolívar, ya que estamos seguros de que algún día
podremos ofrecer a América un verdadero jubileo del culto bolivariano,
que vengan gentes de todos los pueblos de Venezuela; que vengan gentes
de todos los pueblos de América, que lo sintieron pasar y lo sintieron
libertar; que vengan aquí un día en que esos huesos intactos sean
sacados de la urna de metal innoble, y sean colocados en la urna de
cristal y de oro que su pueblo le labra y la filigrana para guardarle
como el mayor tesoro de su corazón. Ese día desfilarán frente al Panteón
Nacional para rendir homenaje a la presencia de Bolívar, todas las
fuerzas de Venezuela, todas las fuerzas vivas y espirituales del mundo
americano, vendrán gentes de todas partes de allí a ofrecerles no sólo
el homenaje que se le debe a su memoria, sino también un poco de
promesas por el porvenir, y un poco de remordimiento por el pasado.
Gracias
comandante Chávez entre tantas cosas, por el privilegio que me dio de
descubrir el cuerpo de Bolívar, aún siento su llamarada de vida en mi
rostro y en mi alma, que me inyectó aquel 16 de Julio de 2010 cuando lo
descubrimos. Compañeros y compañeras.
Bolívar vive y combate con nosotros, por la Patria buena, por la Patria nueva.
¡Viva Bolívar!
—¡Vivaaa!
Lo invito comandante a develar junto con los niños y niñas la imagen del rostro del Libertador Simón Bolívar.
—Aplausos.
El Presidente invita a la comisión a que se acerque.
—Aplausos.
Presidente Chávez: Vamos a develar, pues, hay una cuerdita, mira, vamos a tirar: uno, dos y tres.
—Aplausos.
Miguel, el niño genio, uno de los tantos niños genios. Tú eres de allá de Bailadores ¿no? O sea que tú bailas mucho.
Bueno, y ahora ¿qué vamos a hacer? Vente Miguel a rendir los honores, vamos pues. Ustedes sí están disciplinados.
(Himno nacional de la República Bolivariana de Venezuela: Gloria al bravo pueblo)
Presidente Chávez: ¡Viva Bolívar!
—¡Vivaaa! Aplausos.
Trece
años y va para la universidad. Este sacó 28 y 30 en todas las materias,
en matemática sacó 25, en biología sacó 40 ¿no? Así es ¿no? Y ya da
clases de matemática, sí, sigan el ejemplo de Miguel, que estudia
bastante, y ustedes también estudian mucho ¿no?
Niños: Síii.
Presidente Chávez: ¡Ajá! ¿Y qué van a hacer ustedes ahora? ¿Qué hacemos ahora? Miguel ¿qué hacemos ahora? ¿Nos sentamos será?
Miguel Alejandro Ramírez: Sí.
Presidente Chávez: ¿Sí? Vamos a sentarnos pues disciplinadamente.
¡Viva Bolívar!
—¡Vivaaa! Aplausos.
Presentador
Seguidamente escucharemos la explicación del proceso de reconstrucción
facial en 3D, del rostro del Libertador y Padre de la Patria Simón
Bolívar, por parte del antropólogo forense Lourdes Pérez.
Presidente Chávez:
Me están recomendando Lourdes (perdóname sólo un segundo ¿no?) publicar
por chavezcandanga la imagen, las imágenes que tenemos allí, aquí está
el mensaje: Digo con Neruda, Bolívar despierta cada 100 años cuando
despiertan los pueblos. ¡Viva Bolívar! He aquí su rostro. A ver, listos,
salió.
Lourdes Pérez:
Primeramente quisiera destacar que esta reconstrucción facial
científica se llevó a cabo gracias a la voluntad de un gobierno
profundamente bolivariano.
—Aplausos.
Y
en nombre de todo el equipo científico que participamos en esta
investigación estamos agradecidos por haber rescatado la memoria del
gigante de América, del personaje más trascendental de la historia de
Venezuela.
Después
de la exhumación se hizo énfasis en el estudio bioantropológico de los
restos del Liberador. Para hacer la reconstrucción facial se realizó un
análisis antropológico del rostro del Libertador, sustentado en
parámetros ontogénicos generales y particulares, basados en la
descripción de las características morfológicas presentes en los huesos
de la cara, del cráneo del Libertador.
Esto
se llevó a cabo a través de la validación científica y la descripción
detallada de cada uno de los segmentos anatómicos correspondientes al
cráneo; el tipo facial es muy importante, y el morfotipo del Libertador
permitió clasificarlo y describir cómo eran realmente los rasgos
morfológicos del Libertador a través de las simetrías, asimetrías,
morfología y balance presente en el cráneo. Se utilizaron para ello
puntos y mediciones, con puntos de referencias estandarizados, para lo
cual se utilizó la técnica craneométrica. Esta técnica permitió realizar
mediciones, evitando así errores subjetivos procedentes de
descripciones cualitativas. Es así como de esta manera se realizaron las
mediciones y se registraron a partir del uso de calibradores
internacionalmente aceptados, convirtiendo así las mediciones y
comparándolas con las variaciones estándares, y poder convertir las
dimensiones métricas que se realizaron en el cráneo, en caracteres
gráficamente reconocibles como lo estamos observando en este momento en
la reconstrucción facial.
La
disposición de los tejidos blandos se realizó, y así como la
disposición de todo lo que es la miología, a partir de disposición y
utilización de tablas, internacionales y nacionales, adaptadas a nuestro
contexto étnico poblacional.
Es
así como hoy 24 de Julio del 2012 tenemos en resumen, y desde el punto
de vista científico, la reconstrucción facial, se utilizó la técnica de
la reconstrucción facial para graficar realmente cómo eran las
características de nuestro Libertador.
La
base fundamental de la reconstrucción, y el uso de la tecnología de
vanguardia fue a través de la utilización de una tomografía axial
computarizada realizada al cráneo del Libertador, el cual fue realizado
por la doctora Maribel Yoris, nuestra única radióloga, imaginóloga
forense de Venezuela.
—Aplausos.
Debemos
destacar que este resultado científico es el conjunto de una serie de
disciplinas científicas que a partir de sus conocimientos permitieron
hoy en día tener el rostro del Libertador.
La
doctora Sonia Viso, odontólogo forense del Cuerpo de Investigaciones
Científicas, Penales y Criminalística, nos aportó: “A partir de las
mediciones realizadas en el tercio inferior facial del cráneo del
Libertador, un conjunto de características que permitieron validar desde
el punto de vista científico el rostro del Libertador. Recordemos que
los tejidos faciales lo que hacen es atenuar las características
morfológicas presentes en nuestro complejo cráneo facial.”
Igualmente
la doctora Yanuacelis Cruz médico patólogo, a través del estudio
realizado al cráneo del libertador, aportó elementos desde el punto de
vista científico que permitieron describir y atenuar las características
y las expresiones, como podemos observar, en los surcos nasogeniales,
los surcos de la frente, propio de un sujeto de la edad; utilizamos los
caracteres métricos y morfológicos, tomando en cuenta referencias bio
antropológicas del sexto y de la ancestría racial de nuestro Libertador,
que es de tendencia caucasoide.
Es
así como hoy podemos concluir, y después de dos largos años de
aplicación de métodos científicos, podemos tener el rostro del
Libertador basados en la descripción morfométrica, antropológica
realizad en el cráneo.
Pudimos
también constatar que el rostro del Libertador desde el punto de vista
de las proporciones, coincide con las iconografías que hemos tenido
hasta ahora de nuestro Libertador, y es por eso que hoy damos a conocer
desde el punto de vista científico el verdadero rostro del Libertador.
—Aplausos.
Presidente Chávez: ¡Bravo!
—Aplausos.
Presentador:
Seguidamente la exposición de las causas de la muerte de nuestro
Libertador Simón Bolívar, a cargo de la ciudadana Yanuacelis del Carmen
Cruz Calcaño, ella es médico cirujano especialista.
—Aplausos.
Presidente Chávez:
Fíjate, yo voy a hacer una aclaratoria, doctora perdone, porque ayer yo
hice un comentario a algunos periodistas cuando estábamos despidiendo
al ministro Julio de Vido allá en la puerta, y luego vi algunos
titulares de algunos... unas noticias pues, y tú has dicho, ¿cómo fue
que dijiste? A exponer las causas...
Presentador: La exposición de las causas de la muerte del Libertador.
Presidente Chávez:
No es exactamente así ¿no? Porque se puede malinterpretar, se puede
malinterpretar, a veces uno quiere decir algo, o le sobra una palabra, o
le falta una palabra, es una investigación que está en marcha, y se han
detectado cosas muy importantes, muy importantes, que tienen relación.
Pero ayer algún diario titulaba: “Mañana se expondrán las causas de la
muerte del Libertador...” No, no es exactamente así, científicamente
hablando, eso hay que aclararlo muy bien, como tú lo dijiste como que si
la doctora va a exponer las causas de la muerte del Libertador, yo
quería agregar ese comentario, porque me pasó a mí ayer ¿no? Ya dijeron
que yo hoy iba a exponer las causas de la muerte de Bolívar, y no es
exacta y científicamente así, pero vamos a oír la exposición ¿verdad?
Doctora
por favor. Son hallazgos muy importantes en el camino que ojalá nos
lleve a determinar exactamente las causas de la muerte del padre
Bolívar. Disculpe doctora la interrupción, por favor.
Yanuacelis del Carmen Cruz Calcaño:
No se preocupe. Muy buenos días, otra vez agradezco a nombre del equipo
el habernos permitido ese contacto con el Padre de la Patria.
En
cuanto a la correlación clínico-patológica que hacemos los patólogos
sobre la causa de la muerte, se realizaron estudios detallados de cada
uno del tejido óseo del cadáver del Libertador, e incluso estudios
histológicos y radiológicos, para nosotros poder decir la proyección de
los agentes infecciosos que pudieran haber afectado al Libertador.
En
el caso de los estudios histológicos, además se le practicaron
coloraciones especiales que fueron vistas al microscopio para bacilos
ácido-alcohol resistente como es la tuberculosis y hongos, para nosotros
poder terminar. Además este tejido óseo nos sirvió para hacer una osteo
histomorfometría, que son técnicas vanguardistas que nos permitieron
corroborar la edad que tenía el Libertador para el momento de su muerte,
con un diferencial de edad más o menos dos años ¿okey? Confirmando así
la edad que tenía el cadáver estudiado.
Además se hizo el estudio desde el punto de vista genético, de PCR, para agentes infecciosos.
Actualmente
en nuestro país tenemos limitaciones con restos óseos antiguos en el
estudio de PCR, por lo tanto se buscó en el mundo una persona que
tuviera la suficientemente experiencia en la realización y el trabajo de
restos antiguos como el doctor Taylor, en Londres, en el Reino Unido.
Él realizó estudios para Mycobacterium
en tuberculosis, Mycobacterium en bovis, Paracoccidioidomicosis
brasiliensis, Brucellas sp., Leishmaniasis cutánea y para Treponema pallidum.
Es decir se investigaron los agentes infecciosos principales para Tuberculosis, para Brucellosis, para Paracoccidioidomicosis, para Sífilis, y todos estos arrojaron ser negativos. ¡Okey!
Quedando solamente abierta la investigación para Histoplasmosis, que es un hongo que tiene la particularidad de dar una sintomatología muy similar a la de la Tuberculosis.
Este hongo tiene la particularidad que incluso produce concreciones
calcáreas, tal cual como la tuberculosis, concreción calcárea que fue
retirada de los pulmones por parte del doctor Reverend al realizar él la
autopsia del Libertador.
Todo
esto, más los signos y los síntomas estudiados para una cantidad de
enfermedades, permitió que nosotros pudiéramos decir que... Actualmente
estamos esperando el estudio solamente para el hongo Histoplasmosis.
Así mismo se hizo un estudio detallado de todos los pasos de la
historia médica del doctor Reverend, para nosotros poder saber los
signos y los síntomas que tuvo su excelencia para el momento de su
enfermedad.
Esto
nos reflejó las dosis de los medicamentos, que eran los medicamentos de
la época, como es el caso de arsénico, se hicieron los estudios para
arsénico, siendo no concluyentes los estudios, pero sin embargo sabemos,
desde el punto de vista histórico y desde el punto de vista médico, que
fue tratado con arsénico.
De igual forma el Libertador recibió unos vesicatorios, producto de un insecto, que es la Lyttia vesiculata, lo que es la Cantárida, que es un potente veneno, pero era el tratamiento que había para la época para las enfermedades.
Él tuvo, desde el momento en que empezó a recibir este tratamiento, toda la sintomatología de una intoxicación por Cantárida, que era las vesículas en la piel (poliurea, anuria, disuria), es decir dolor para orinar, orinas con sangre, orinas aumentando en frecuencia en poca cantidad, hasta llegar a la anuria, es decir hasta no poder orinar y llegar a una insuficiencia genitourinaria, una insuficiencia renal.
Esto
evidentemente era el tratamiento de la época, pero tenemos también la
causa efecto, cuando se aumentaron las dosis de los vesicatorios y la
frecuencia con la cual él lo recibió, hubo el desencadenante del
deterioro de la enfermedad del Libertador.
Estudiamos
también cada uno de los datos aportados por la historia médica del
doctor Reverend y de la autopsia realizada por el doctor Reverend, todo
esto nos llevó a poder certificar que tuvo una enfermedad de tipo
respiratorio crónica, que se agravó con un proceso infeccioso, con un
dolor torácico, una secreción mucupurolonta, fiebre; que aunado ese
proceso de deterioro respiratorio a su proceso de trastorno
hidro-electrolítico, producto de esa Cantárida, de esa
intoxicación y ese trastorno genitourinario, generaron cada vez edema
cerebral con compresión de centros importantes, cardio-respiratorios a
nivel del sistema nervioso central, como es el bulbo y el cerebelo,
llevándolo a la muerte.
Es
importante destacar, como todo paciente, que el estado anímico de los
seres humanos es sumamente importante en el desencadenante de la
enfermedad. El estado anímico del Libertador para el momento de su
enfermedad se fue deteriorando cada vez más, a medida que él estaba
deprimido y lo reflejaba en su enfermedad, en el avance de su
enfermedad.
Cabe
destacar que para la reconstrucción facial, para nosotros poder darle
un toque que nos reflejara también parte de su enfermedad respiratoria
crónica, que se había incluso reagudizado, fui a El Algodonal y
entrevisté a cien pacientes con enfermedades pulmonares crónicas, que
reflejaban en la tez de su piel y en el diámetro anteroposterior de los
ojos, producto de la deshidratación, de su problema ventilatorio, las
características. Eso se plasmó también, el daño crónico desde el punto
de vista respiratorio, en la reconstrucción facial.
Queda
el compás abierto para investigaciones futuras, y el avance de la
ciencia para poder confirmar nosotros los datos de arsénico con certeza,
para poder decir, aunque clínicamente sabemos por signos y síntomas que
no había una intoxicación aguda, pero sí una intoxicación por Cantárida.
Aún la ciencia no ha avanzado en el mundo lo suficiente como para
nosotros poder identificar metabolitos derivados de esta intoxicación
por Cantárida, y estamos ahorita en el proceso del estudio del último agente infeccioso que vamos a determinar, que es la Histoplasmosis, que es este hongo, para poderlo confirmar.
Todo
esto coincide con investigaciones históricas que se han hecho de la
historia médica de su excelencia, y de la autopsia realizada por el
doctor Reverend. Para nosotros es un idioma muy particular el idioma
médico, y más el anatomopatológico, cuando nosotros describimos los
órganos, que no tenemos que verlos para saber el órgano enfermo y
podemos orientarlo y saber qué enfermedad tenía. La descripción de la
autopsia del doctor Reverend, junto al análisis que hicimos de la
historia médica y todos los estudios que se realizaron con alta
sensibilidad y precisión, tanto en Venezuela como fuera de Venezuela,
arrojaron esos allá.
—Ovación.
Presidente Chávez: Yanuacelis.
¿Y ahora qué viene, Elías?
Presentador: De esta manera damos inicio al conversatorio, por parte del comandante presidente Hugo Chávez.
Presidente Chávez: Conversatorio.
Bueno, gracias compañero. De nuevo les ratifico nuestro saludo. ¡Está de cumpleaños Simón Bolívar! ¡Viva Bolívar!
—Aplausos. ¡Vivaaa!
Viva
Bolívar. Bolívar en verdad, y estamos de júbilo en Venezuela, y no sólo
en Venezuela, en todos los países de la América Latina, del Caribe y
más allá. Porque en verdad Bolívar fue, es y será, uno de los más
grandes gigantes de la humanidad. ¡Un verdadero gigante de la causa
humana, de la lucha humana! Lo mejor de lo mejor de la especie humana.
El Che Guevara: “El revolucionario se ubica en el escalón más alto de la
especie humana...”. ¡Cuál Cristo! ¡Cuál Cristo! Así vivió, así luchó y
así murió físicamente Bolívar.
Pero
hoy Bolívar... Decía el grande guatemalteco Miguel Ángel Asturias:
“Bolívar es la lucha que no termina”. También pudiéramos parafrasearlo y
decir: “Bolívar es el parto que no termina...”. Bolívar nace, así lo
creo, todos los días en nosotros mismos; en su pueblo, en estos niños,
en estas niñas; en los maizales, en el retoño de las plantas, en la
lucha por la vida, en la lucha por la justicia social. Ahí Bolívar nace y
renace. Por eso decía, parafraseando a Miguel Ángel Asturias: La lucha
que nunca termina. El parto, el nacimiento que nunca termina. ¡La
Patria, la Patria! La Patria Bolívar también decía Pablo Neruda. Ahora
que hemos presentado este su rostro, este su rostro.
Será
el instinto histórico-genético que uno lleva, como patriota, como hijos
de Bolívar que somos, lo que produjo Elías... Tú recordabas querido
vicepresidente, felicitaciones querido compañero; y a toda la Comisión
Presidencial, y a todos ustedes, muchachos, muchachas, compatriotas.
—(aplausos).
Quienes
se dedicaron y se han dedicado con esmero, con un altísimo sentido de
responsabilidad, de profesionalismo en todo este proceso que ya Elías
nos describía, de ya más de dos años. Y está abierto el camino ¿verdad?
Ahora, Elías nos hacía un resumen de ese proceso.
Pero
yo recuerdo aquella madrugada cuando tú me dijiste: “Estamos listos
para recibirlo...”. Y yo fui allá al Panteón, fui con una de mis hijas, y
no sé porqué, aun cuando yo era uno de los que tenía dudas, de tanto
leer y buscar me entró un día la duda, pues, una duda que era como una
angustia permanente, y cada vez que iba al Panteón a rendir honores —no
de Presidente, mucho antes—, de oficial en filas, y luego de Comandante
en Jefe y Presidente, pues yo siempre me llegaba la duda, me asaltaba la
duda. ¿Serán tus restos, padre, los que están ahí de verdad?
Pero
cuando vi aquel... yo lo vi como un niño, a mí se me pareció fue un
niño, yo vi el esqueleto allí. Y no sé porqué —doctora Morales— yo dije:
¡Sí eres! No sé, sería la llamarada que sintió Elías, y que sentimos.
Como
lo dice el poeta Andrés Eloy: “Cuando se abra algún día esa urna de
plomo...”. Que no quisieron abrirla allá en el 47 fue, porque apareció
un cráneo por allí, y hubo un gran debate que fue a la Asamblea
Constituyente, y era Andrés Eloy Blanco el presidente de la Asamblea
Constituyente, pero las élites políticas (adecas y copeyanas) se
opusieron, los líderes principales se opusieron, no se aprobó en la
Asamblea Constituyente la propuesta de abrir la urna de plomo, para
verificar si había cráneo ahí, y de quién era ese cráneo que consiguió
un eminente médico venezolano, cuyo nombre ahora mismo no recuerdo,
ustedes deben recordarlo.
¡El
doctor “Pepe” Izquierdo! Quien fue un eminente y muy respetado
científico, médico investigador. Él consiguió en la Catedral de Caracas
ese cráneo, y él afirmaba que era el de Bolívar. Después yo no sé qué se
hizo ese cráneo, yo empecé a buscar huellas de ese cráneo, y no he
podido conseguir más allá, porque lo pusieron ahí en la Asamblea
Constituyente, allí estuvo expuesto. Y un gran debate.
Luego
vimos la llamarada, sentimos la llamarada. Andrés Eloy dice en algún
discurso: “Cuando algún día se abra esa urna de plomo podremos ver, o
podrán ver unos ojos hablándonos desde el fondo de aquellas
concavidades...”. Y así fue, más o menos, lo que uno sintió.
Y
ustedes que lo vieron, y que con un respeto sagrado, estoy seguro,
hicieron lo que yo no hice, manipular, llevar, traer, fotografiar,
escanear; una tarea de hijos ¿verdad? Estoy seguro que lo hicieron
ustedes con un amor sublime y que nunca en sus vidas olvidarán esta
experiencia, y se la transmitirán a sus hijos, a sus hijas, y de ahí a
sus descendientes.
Bueno,
esto forma parte, sin duda, de la resurrección de Bolívar, así como
Lázaro cuando llegó Jesús y le dijo: “Levántate, Lázaro, y anda...”.
Aquí llegó, bueno, fue un Jesús colectivo, un Jesús hecho pueblo y le
dijo a Bolívar: “Levántate Lázaro Bolívar y anda, que te necesitamos.
Vente con nosotros a la vida...”.
—Aplausos.
Y Bolívar hoy vive, vive.
Aquí
un grupo de intelectuales, historiadores, de varios países están por
allá regados. Por allá creo que llegó Fernando Buen Abad, que lo vi
anoche en La Hojilla hasta tarde, yo me dormí y ustedes seguían hablando ahí, tú y Mario Silva ¿no?
Bienvenidos,
historiadores del ALBA, Carmen Bohórquez. Ese es un evento anual, ¿no,
Carmen? Calzadilla. De distintos países. Por ahí estaba la lista, ¿quién
la tiene, por favor? Tengo tantos papeles aquí.
Ahora,
les doy la bienvenida y gracias por reunirse en Caracas, además en esta
fecha, en esta fecha. Y es un buen regalo para el padre Bolívar.
Historiadores,
escrutadores de historia. Y la historia, yo quiero insistir en esto,
porque hay una permanente agresión contra la historia, de las filas
burguesas. Agredir a la historia es como agredir —Miguel— la matemática.
Allí
está el niño genio, ese tiene... ¿Cuánto es el coeficiente intelectual
que tiene? ¿Ah, Maryann? No, él no. ¿Cómo estás, Miguel? ¡Maryann! ¡Epa!
Maryann Hanson: Él tiene 13 años y tiene un coeficiente intelectual de 140, Presidente.
Presidente Chávez: ¡Ciento cuarenta el coeficiente intelectual!
Maryann Hanson: Pero
hay que hacer una acotación, que el coeficiente intelectual no es
suficiente para valorar una inteligencia sobresaliente, superdotada,
sobredotada, excepcional, genial, excelente.
Presidente Chávez: Muchas gracias, Maryann.
—Aplausos.
Miguel.
Y los niños y niñas que están ahí, que terminaron su año escolar.
Felicitaciones a los millones de niños y niñas que han terminado su año
escolar y ya están de vacaciones, a disfrutar las vacaciones, pues.
Bueno,
entonces hay algunos sectores de la llamada intelectualidad burguesa,
que tiene una agresión permanente contra la historia. La historia,
compatriota, no son hechos el pasado. No. Eso pudiéramos decir que esa
es la historiografía. La historia, el mismo Bolívar lo dijo un día, a su
manera, porque era un gran filósofo también Bolívar, un gran pensador,
un poeta sin límites, un soñador, un Quijote. Si el Quijote hubiese
tenido descendencia, alguien escribió, es Bolívar su hijo, hubiese sido
Bolívar su hijo. El Quijote.
Entonces
un día lo dijo Bolívar, lo escribió, está escrito por ahí en su
archivo, que ahora está totalmente digitalizado, ¿no Calzadilla? Y lo
vamos a presentar hoy, hoy vamos a presentar y abrir al mundo el archivo
digitalizado del padre Bolívar. Está escrito por allí, en alguna de sus
miles y miles de cartas, documentos, etc.; discursos que quedaron
escritos. “La historia —dijo— es un inmenso bien que contiene...”. Esto
sí es textual porque me lo aprendí así hace muchos años. “La historia es
un inmenso vientre que contiene más esperanzas que sucesos pasados, y
los acontecimientos futuros deben ser superiores a los pretéritos...”.
Eso lo dijo tal cual lo escribió Simón Bolívar.
Y
mucho más acá, el filósofo Heidegger, quien pensó mucho en el tiempo
¿no?, y en el pasado, en el presente, en el futuro; un poco como
Nietzsche, Heidegger lo dijo de esta manera: “No hay nada más cargado de
futuro que el gran punto inicial allá atrás...”. No hay nada más
cargado de futuro que el pasado, pues. Y es cierto.
Ahora,
hay algunos que tirotean la historia, francotiradores, agreden la
ciencia histórica, una agresión permanente, porque no les conviene que
se conozca la verdad de la ciencia histórica, porque la ciencia
histórica... O más bien, el conocimiento de la verdad a través del
estudio de la ciencia, de la historia como una ciencia, es un hecho
subversivo, subvierte, cuando uno descubre la verdad histórica uno se
estremece, cuando comienza a descubrirla, aunque sea una pequeña parte.
Yo
me recuerdo de teniente en la Escuela Militar, instructor de algunos
como el señor presidente de la Asamblea Nacional, que era cadete en ese
tiempo; o el general en jefe Rangel Silva, que está por allá.
Bien,
y una de mis materias preferidas era la historia, para estudiarla y
también como instructor pues, pero uno lo que hacía era aprender en vez
de enseñar; aprender junto con ellos, en el aula, en la investigación.
Yo
me di cuenta, descubrí en un documento, que a Bolívar lo expulsaron de
Venezuela, y yo vine a descubrirlo cuando era teniente ya, a los 25, 26.
Me dio una indignación. Pero una indignación, incluso saber que querían
fusilarlo aquí, y que el general Páez dijo: “No, yo lo prefiero en el
exilio...”. No se atrevió Páez a fusilar a Bolívar.
Y
después uno se fue metiendo más a fondo. ¡Dios mío, pero qué pasó aquí!
Y descubriendo la verdad. El Mariscal Sucre fue enviado por Bolívar (en
1830) a dialogar con Páez para trata de salvar la unidad de la Patria
Grande. Prohibieron desde Caracas que el Mariscal Sucre pasara de San
Cristóbal. A riesgo, bueno si da un paso más fuego contra él.
Sucre,
que no era ningún cobarde, como lo sabemos, le escribe a Bolívar, quien
estaba en Bogotá, y le dice: “Yo me regreso, porque no quiero más
sangre entre hermanos...”. A los pocos meses él mismo estaba derramando
su sangre —cuál Abel, ¡el Abel de Colombia!— allá en Berruecos.
“¡Ay balazo!” Asesinado cobardemente en la selva de Berruecos.
Y luego todo ese proceso que llevó a Santa Marta al padre Bolívar.
Desde
hace años yo tengo aquí en el alma la certeza de que Bolívar no murió
como nos lo cuentan en los libros de historia oficial. Y estas
investigaciones que ustedes están adelantando, con ayuda incluso de
universidades e investigadores muy prestigiosos, allá en Gran Bretaña,
por ejemplo, yo me leí todos los informes, un resumen pues. Incluso del
doctor inglés... ¿cómo se llama? ¡Ajá! Un eminente investigador.
Por
aquí están los informes. Y mire que se investigó aquí en el IVIC, se
investigó ahí en Cicpc, se investigó allá en Londres, no hay ningún
rastro de tuberculosis en estos restos evaluados.
Yo
lo saqué, doctor, ¿sabe?, por una simple deducción, mi mama vieja, mi
abuela Rosa, quien me crió, murió de tuberculosis, y mi pobre viejita el
último año de vida ya no podía ni caminar, si apenas podía respirar, y
así se fue apagando, se fue apagando, se fue apagando. Y se fue.
Bolívar,
tres meses antes de su muerte estaba en Cartagena despachando,
reuniéndose, había cruzado en esos últimos meses (en invierno), julio,
agosto, septiembre, octubre, ¿eh? Porque el invierno aquí es igual que
el de Nueva Granada el de Colombia, torrenciales lluvias, a caballo,
desde Bogotá, donde renunció al Gobierno, renunció; y se fue y dejó a
Rafael Urdaneta como presidente encargado.
Bolívar
se abrió, así lo creo, en guerra, en esos meses de agosto... julio,
agosto y septiembre, Bolívar escribió no sé cuántas cartas, están ahí,
están ahí ahora digitalizadas, no es que yo las estoy inventando, están
ahí. Sólo que yo las he venido leyendo por miles en estos años, tratando
de hurgar en el enigma, porque es un poderoso, un grandísimo enigma lo
que quedó sepultado allí.
Bolívar
le escribía a un grupo de generales: “Desplácense hasta Cúcuta y
recojan tantos pesos que harán falta para la logística, y la
alimentación; y reúnan 3 mil soldados y busquen armas, que yo me voy por
Maracaibo...”. Él iba hacia Maracaibo, está escrito.
Y
en la última carta que él escribe, en Cartagena (18 de septiembre de
1830), tres meses casi exactos antes de su muerte, antes del día de su
muerte, él le escribe al general Urdaneta, yo estaba leyendo parte de
esa carta anteayer domingo allá en el Zulia, hay una frase allí que
llama la atención poderosamente, él le dice a Urdaneta. Porque Urdaneta,
presidente encargado, le manda emisarios: ¡que regrese, que regrese! Le
manda cartas. Y él oyó los emisarios, se reúne, oye; lee documentos con
no sé cuántas firmas, y le responde a Urdaneta, y le dice: “He oído y
he tratado de dejarme convencerme, pero no, no, no me convenzo, yo no
tengo nada qué hacer en esa administración. Usted siga al frente, usted
tiene todos los méritos y la experiencia para seguir al frente del
Gobierno. Yo apoyaré a su Gobierno como ciudadano y como soldado...”. Y
le agrega: “Le diré algo más, esta Patria se ha disuelto, y habrá que
reunirla de nuevo por las armas. Primero es existir que modificar...”.
Le dice a lo cartesiano ¿no?, como Descartes: “Pienso, luego existo”.
“Primero
es existir —yo existe, luego modifico—, la Patria no existe, qué se va a
gobernar esta Patria. Habrá que reunirla de nuevo por las armas. Yo me
ofrezco —¡18 de septiembre!— para esa empresa, que es la más difícil,
así nadie me acusará de egoísta. Suyo, Bolívar...”.
Él
andaba desplegado en batalla. Y de repente en octubre él sale a
Turbaco, y la primera carta que hay donde se dice algo de que se siente
mal es en Turbaco, un pueblito cerca de Cartagena, pero él se estaba
moviendo hacia Riohacha, y había una avanzada de tropas bolivarianas
combatiendo contra Pedro Carujo en Riohacha, y él mandaba cartas y
recibía cartas. Y él quería llegar era a Riohacha-Maracaibo, y por ahí
comenzar la reconquista de la Patria, porque además había generales aquí
en Venezuela que estaban listos, esperando sólo que él retornara para
levantarse contra Páez, uno de ellos era Santiago Mariño, el libertador
de Oriente, con muchas tropas que tenían allá. Pero esperaban al jefe,
esperaban al líder, no pudo llegar.
De
repente está enfermo, está enfermo; mareos, vómitos, todo lo que tú
explicabas doctora. Y hay, creo que cónsul o viajero inglés, que vio
cuando a Bolívar lo bajan en silla de manos de un carruaje en Santa
Marta, cuando llegó a Santa Marta. Y él escribe y dice: “Este es un
cadáver viviente...”. Estaba muriéndose ya.
Hay
dudas incluso, yo he leído documentos donde se señalan una serie de
dudas acerca de la calidad profesional del doctor Reverend. Algunos,
incluso historiadores, señalan que no era médico, que había sido como un
enfermero, con todo el respeto a los enfermeros, por supuesto, que es
una profesión. Y, por cierto, Reverend a los pocos años se suicidó en
París, y dejó una carta que hay que leerla, hay que leerla; acusando a
Francisco de Paula Santander de sus desgracias. Y habrá que investigar,
incluso le dije a Elías, investigadores, historiadores, ustedes
historiadores, cuál fue el destino de los que acompañaron a Bolívar
hasta el último momento.
¿Quién
era el dueño de San Pedro Alejandrino? Joaquín De Mier, era español,
había sido militar español. Mariano Montilla, Mariano Montilla después
terminó siendo ministro de Guerra de José Antonio Páez, y muy rico. Hace
pocas horas se está hablando de un sobrino octavo de Bolívar.
Bueno,
anoche Mario Silva, y con la colaboración de Buen Abad, presentaron
otro árbol genealógico ¿no? Pero un sobrino octavo de Bolívar.
Ahora,
habría que decir que el sobrino primero de Bolívar, fíjense la línea de
los sobrinos de Bolívar, se llamaba Fernando Bolívar, y sería bueno
leer la carta que Simón Bolívar le escribe a su sobrino primero, no al
octavo, porque no lo conoció, conoció al primero.
El
sobrino primero de Bolívar era un joven de muy mala conducta, y Bolívar
lo reprime y le escribe: “No te da pena que estos llaneros, que eran
incultos, ahora brillan. Y tú, hijo de mi hermano —y no sé qué más— mira
cómo andas en Bogotá...”. Le gustaba mucho jugar el dinero, el licor,
etc.
Estudió
varios años en Estados Unidos y regresó a Bogotá, pero hecho nada. Y
luego Bolívar lo recoge. Pero en las investigaciones —Buen Abad— de
aquella noche del atentado septembrino en Bogotá... Tráeme la caja, por
favor. Yo voy a mostrar algo también que es muy importante, que me llegó
como una donación, pero no para mí, para la República, yo me imagino
que con esta pistola fue que salió Manuela Sáenz a defender a Bolívar el
28 de septiembre, porque estas dos pistolas...
—Aplausos.
Estas
dos pistolas pertenecieron a Bolívar, y a Manuela. Y por esas cosas de
la vida llegaron a mis manos. Por ahí tengo la carta de un compatriota
llamado Ruperti, Wilmer Ruperti, él me pidió que yo hiciera público esto
y cumplo, estas no son para mí, por supuesto, él las adquirió en una
subasta en Nueva York, hace pocos años, creo que fue el 2004, y las
tenía, y decidió donarlas a la República.
—Aplausos.
Bueno,
ahí está la historia, seguramente adquiridas por el joven Bolívar en
Europa, por allá cuando pasó aquellos años de 1804 —Carmen ¿no?—, sí,
cuando conoció a Fanny Du Villars e hizo vida pública y política, casi
que lo expulsan de Francia al joven Bolívar, por emitir conceptos muy
duros contra Napoleón, ya cuando Napoleón había asumido la dictadura y
traicionando el espíritu de la Revolución Francesa.
Bolívar,
el joven muy rico que era, en una carta que le manda él, apenas de 22
años recién cumplidos, al viejo coronel Tristán, peruano, y le dice:
“Usted verá coronel, yo sólo soy un triste rico, mi vida no vale
nada...”. Él andaba buscando el camino, y lo consiguió en Europa: la
Revolución.
Él
compró estas pistolas, según dice la reseña histórica, sólo Napoleón...
O sea, el que fabricó estas pistolas creo que fabricó tres juegos nada
más, en plata y en oro, y un juego habría pertenecido a Napoleón
Bonaparte, otro a Simón Bolívar, y un tercero no recuerdo a quién. A lo
mejor al sobrino octavo ¿verdad?
Pero,
bueno, el sobrino primero; el sobrino primero, ahí está escrito, no lo
estoy inventando, el sobrino primero, que se llamaba Fernando Bolívar,
tuvo una actitud muy extraña —en las investigaciones surgió— la noche
del atentado septembrino, del 25 de septiembre fue, de 1828, cuando casi
matan a Bolívar en Bogotá. Salió Manuela con una pistola, digo yo que a
lo mejor fue con una de estas, porque las tenía Manuela; y después
Manuela se las dona, por instrucciones de Bolívar, a un caballero
inglés, y por ahí viene la historia de estas pistolas, que aparecieron
ahora.
Porque
cuando Bolívar se va se las deja a Manuela, con muchas de sus cosas
personales, en Bogotá; y luego él, para agradecerle a un caballero
inglés, cuyo nombre está por aquí grabado en esta placa, que tiene casi
200 años y es una llamarada también, y hay una firma de Manuela
hermosísima, donde ella firma y coloca la M como un corazón, y una S.
Sería bueno hasta pasarla ahí, Escalona ¿no? A ver. Es como un corazón con una S, pero el corazón es la M de Manuela ¿ves?
Entonces
ella, cumpliendo instrucciones de Bolívar, quien estaba por allá en
Cartagena, le dona estas armas a un caballero inglés.
Bien,
pero la actitud del sobrino primero quedó muy cuestionada, su conducta
pues, la noche esa de septiembre. Mataron a Ferguson, hirieron a otro
edecán, y él desapareció de la escena. Lo menos que fue, dice algún
historiador, fue un cobarde, porque se metió en un cuarto, y salió fue
después que pasó todo. Y acompañó a Bolívar hasta Santa Marta.
Pero
al poquito tiempo estaba aquí en Caracas, y escribió una biografía no
de su tío, el gigante, sino escribió una biografía muy complaciente de
José Antonio Páez, quien a pesar de la gloria de Las Queseras, del
Yagual, de Mucuritas y del Campo de Carabobo, sin embargo terminó
hundiéndose en la ciénaga de la traición, y lo usó la burguesía contra
el proyecto bolivariano. Y como yo siempre lo he dicho, admiro a Páez
como soldado, pero jamás como político, le entregó el poder a la
oligarquía, la oligarquía conservadora; y los esclavos siguieron siendo
esclavos; y él mismo se hizo dueño de grandes haciendas y de muchos
esclavos. Y cuando José Tadeo Monagas decretó la liberación de los
esclavos, la libertad de los esclavos, él se negó hasta que no le
pagaran hasta el último centavo del último esclavo. ¡Imagínate!
Hasta
hace poco nosotros rescatamos San Pablo Paeño, en las sabanas del Cajón
de Apure, una de las tantas propiedades que tuvo aquel quien nació pata
en el suelo en Curpa, y terminó muy, muy enriquecido, con muchas
riquezas. Pero le entregó Venezuela a la burguesía criolla y comenzó a
entregarla al imperialismo. Cuando Páez es echado de aquí por fin,
después de tantas guerras, porque él se fue a enfrentar a su pueblo, su
pueblo se alzó contra él, el que había sido su pueblo, los llaneros se
alzaron contra Páez, y muchos otros, Mariño, los Farfán en Apure, y
luego por fin Zamora, y lo derrotan, y es hecho preso y expulsado.
Después desembarcó otra vez y volvió a la guerra, era un guerrero sin
duda, José Antonio Páez.
Pero
al final ya, cansado y anciano, se va. Y ¿adónde fue?, a Nueva York,
allá le rindieron honores, honores. “Tropas de Caballería norteamericana
le rinden honores a Páez”, eso está registrado en grabados de la época.
Y
allá murió, anciano, pero escribió sus memorias. Y en una de sus
últimas páginas dice: “Yo, José Antonio Páez, general en jefe de los
libertadores de Venezuela, nacido en Curpa, provincia de Barinas,
declaro que hubiese preferido morir en un campo de batalla...”. A lo
mejor en Carabobo, al lado del Negro Primero.
Sólo
que luego la burguesía venezolana se encargó de lavarle el rostro al
centauro. Y así vino por la historia. Y hoy le respetamos, pero la
verdad es la verdad. Con la verdad ni ofendo ni temo, dijo aquel grande.
Es la verdad, no podemos dejarnos chantajear o permitir que nos sigan
chantajeando los engañadores de oficio, los engañadores de toda la
historia y de todas las horas.
Bueno, entonces hablaba de Bolívar, de su vida hoy: el Bolívar, la lucha que nunca termina, que nunca cesa; el Bolívar de Neruda, el Bolívar de Neruda y el Canto a Bolívar,
qué maravilla. ¡Qué maravilla! “Padre nuestro que estás en la tierra,
en el agua, en el aire, de toda nuestra extensa latitud silenciosa; todo
lleva tu nombre, padre, en nuestra morada...”. Pudiéramos decir: Todo
lleva tu rostro, padre, en nuestra morada. “Tu apellido la caña levanta
la dulzura, el estaño Bolívar tiene un fulgor Bolívar, el pájaro Bolívar
sobre el volcán Bolívar, la patata, el salitre, las sombras
especiales...”. Y por ahí se va Neruda. “Todo lo nuestro viene de tu
vida apagada. Tu herencia fueron ríos, llanuras, campanarios. Tu
herencia es el pan nuestro de cada día, padre...”. Y al final, al final,
es sublime Neruda cuando dice: “Pero hacia la esperanza nos conduce tu
sombra...”. Pudiéramos decir, tu rostro. Hacia la esperanza nos conduce
tu rostro.
—Aplausos.
“El laurel y la luz de tu ejército rojo, a través de la noche de
América, con tu mirada mira; tus ojos, que vigilan más allá de los
mares, más allá de los pueblos oprimidos y heridos, más allá de las
negras ciudades incendiadas, tu voz nace de nuevo. Tu mano otra vez
nace, tu ejército defiende las banderas sagradas, la libertad acude, las
campanadas sangrientas, y un sonido terrible de dolores precede la
aurora enrojecida de la sangre del hombre. Libertador, un mundo de paz
nació en tus brazos, la paz, el pan, el trigo de tu sangre nacieron; de
nuestra joven sangre, venida de tu sangre, saldrán paz, pan y trigo para
el mundo que haremos...”. Y termina: «Yo conocí a Bolívar una mañana
larga en Madrid, en la boca del V Regimiento. Padre, le dije: “eres o no
eres, o quién eres”. Y mirando el cuartel de la montaña dijo:
“Despierto cada cien años, cuando despierta el pueblo”». Ahí está su
rostro vivo, vivo en nosotros y con nosotros.
—Aplausos.
Miren,
tenemos otro asunto importante el día de hoy, es que vamos a presentar,
aun cuando no vamos a inaugurarlo todavía, también vi en prensa por
ahí: “será inaugurado el mausoleo”. No. Aún no. Faltan algunos detalles.
Pero yo sí creí útil, necesario, bonito y bueno, presentar hoy el
mausoleo que hemos construido en honor al padre de la Patria Simón
Bolívar, allá en el Foro Libertador, en la avenida Panteón, allí mismo,
muy cerca del Panteón Nacional está “Farruco” Sesto, el ministro de
Estado para la Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas, y ahí
está con un grupo de compañeros y compañeras, vamos a darle el pase a
“Farruco” para que nos muestre. En breves minutos “Farruco”, en pocos
minutos, el mausoleo bolivariano. Adelante, “Farruco”.
Ministro de Estado, Francisco “Farruco” Sesto: Buenos días, Presidente.
Como
toda Venezuela, muy emocionado, viendo las imágenes de Bolívar, su
rostro verdadero. De verdad que yo tuve la oportunidad de estar en la
Comisión Presidencial para la Exhumación de los Restos de Bolívar,
recuerdo la emoción que sentimos, esa emoción nos ha acompañado siempre,
y ahora viendo el rostro, como uno de los resultados de la comisión, la
verdad que es muy conmovedor.
Con
esa emoción recibimos la instrucción suya de construirle un mausoleo al
Libertador, al padre de la Patria, lo hicimos con amor, lo hicimos con
rigor, y creo que —Presidente— el equipo que trabajó en esto, un equipo
numeroso, más de mil trabajadores han pasado por aquí, en las distintas
especialidades, equipo de arquitectos de un trabajo hecho por la Oficina
Presidencial de Planes y Proyectos, adscrita al Despacho de la
Presidencia, que recibe instrucciones directamente de usted, nos
encomendó esa misión y estamos ya listos para entregar este mausoleo.
Está
enclavado en este territorio tan importante, a 500 o 600 metros del
centro de Caracas, de la plaza Bolívar, al lado del Cuartel San Carlos,
ahora con una operación importante de renovación urbana, esto se amplía
en varias hectáreas, 2,5 hectáreas de plaza que estamos construyendo,
más todo el Foro Libertador, la plaza que antecede al propio Panteón. Es
decir, queda un territorio maravilloso.
Usted
sabe también que aquí viene una operación de renovación urbana, que la
haremos con mucho respeto por las comunidades, con mucho diálogo con
ellas, nadie será perjudicado, la idea es dignificar el territorio que
rodea al mausoleo y al mismo tiempo crear las condiciones de vida dignas
de todas las familias que están acá.
Presidente, está lloviendo un poquito. Yo voy a enseñarle algunas imágenes, a ver si puedo hacerlo en medio de la lluvia.
Fíjese,
yo tengo aquí una imagen, no sé si la capta la cámara, que es como era
en el siglo XIX, esta es una imagen seguramente de 1880 por allá, bueno
aquí ya no había casi la ciudad, estábamos en los límites. Se ve el
Cuartel San Carlos y se ve el Panteón, donde ya estaban los restos de
Bolívar, porque se hizo el trabajo con la iglesia de la Trinidad, se ve
que es una edificación un poco neogótica, unas torres que son
puntiagudas.
Esta
foto también es del siglo XIX, finales del siglo XIX. Es una foto antes
del trabajo de remodelación serio que hizo un arquitecto vasco que
venía de Cataluña, en el año 29, él llegó a Venezuela en el año 97, y
así lo conocemos nosotros. Todo un gran torreón, esa estructura central,
que triplica la altura del Panteón.
Fíjese,
cuando usted nos dio la instrucción la asumimos, en conversaciones con
usted, como una ampliación, un nuevo edificio, pero que fuera
continuación del mismo, una nueva nave donde Bolívar (el Libertador)
estuviera solo allí. Había una razón muy afectiva, estamos muy
sensibilizados por la experiencia de la exhumación de los restos, y por
otro lado necesitamos de verdad sentir que el Libertador tenía una casa
digna, o que nosotros sabemos que son sus restos los que están allí,
porque el Libertador anda por la calle con nosotros en este proceso
revolucionario, y siempre despierta con los pueblos y recorre su espada
la América Latina.
Quería
darle una información, Presidente, fíjese que explica un poco la
geometría que algunas personas tienen como curiosidad por saber en qué
consiste la idea. Al hacer la ampliación nosotros colocamos el propio
Panteón, esta es una planta, un edificio, un dibujo visto desde arriba,
lo que colocamos como si fuera un espejo. Y después, por razones
funcionales, necesitamos que aquí el pueblo estuviera dentro del
mausoleo en los actos, entonces ampliamos. Ese dibujo rojo, rosado, da
idea de la ampliación.
De alguna manera es la misma planta, pero ampliada para cumplir con esa necesidad funcional.
De
la misma manera hicimos el mismo trabajo con el espejo, esta es al
fachada, o el corte del viejo Panteón, y lo colocamos (el otro edificio)
al lado, para ver qué diálogo se establecía.
Fíjense que para un observador atento, verá que hay una geometría muy parecida, pero
por supuesto hecha un siglo después, más de un siglo después. Vean que
hay un elemento vertical que después va descendiendo como en curva, en
una curva virtual, y después aquí esa especie de silueta que representa
el espacio del nuevo mausoleo, de alguna manera reproduce pero con una
geometría contemporánea.
Y
a esta silueta, que es la que se ve desde la Plaza Bolívar, avanzando
por el Foro, es una silueta que la quisimos recortar con un plano para
destacarla, lejos de irrespetarla más bien le dimos como un fondo, pero
ese fondo es el nuevo edificio ç, un edificio muy digno, Presidente, yo
entre las cosas que con el equipo hemos conversado, estamos ansiosos de
que usted conozca, venga, a ver si puede venir antes de la inauguración,
lo invitamos, es una experiencia, creo, emocionante descubrir ese
espacio, un espacio sagrado, lo hemos hecho como usted nos pidió, con
mucho amor, con mucha consideración, y esperamos, Presidente, haber
cumplido la misión.
Presidente Chávez:
Bueno, gracias “Farruco”. Bueno, cumpliremos la misión el día que
traslademos los restos inmortales, por decirlo así, de Simón Bolívar, al
nuevo mausoleo, problemas de lluvia seguramente, no fue quizás la mejor
presentación, pero queríamos presentar la vista general.
Gracias
Farruco, gracias a ti y a todos los ingenieros, arquitectos,
historiadores, trabajadores y trabajadoras que han laborado en esa obra,
y tenemos pendiente la otra, no te olvides Elías, el monumento arriba,
arriba en el Waraira Repano, tengo varias propuestas, a mí me gusta
mucho la que hizo, hace varias décadas, Alejandro Colina, él hizo un
boceto para un gran monumento a Bolívar, hay otros por ahí, Paúl del Río
presentó uno. Bueno, puede ser un concurso ¿verdad? Pero hay que hacer,
así lo creo hace años, un monumento a Bolívar allá arriba en el Waraira
Repano. La idea mía siempre fue hacerlo arriba donde está el Humboldt,
pero me dicen los ingenieros y expertos que ahí es imposible por la
altura, la velocidad del viento, la magnitud del monumento. No es lo
mismo hacer un edificio que es rectangular, que un monumento, me han
explicado. Entonces puede ser en alguna de las tantas lomas, Giordani
¿no? Montañas, etc., espacios que hay allí entre la base del cerro y la
cima del Waraira Repano.
Bueno,
es parte del renacimiento de Bolívar. Hace poco decía un connotado
dirigente de la oposición algo que a uno le llama la atención, pero que
no sorprende en verdad, decía en algún discurso, uno de ellos decía:
“Necesitamos un Presidente que haga descansar en paz a Bolívar...”
Bueno, eso es lo que ellos quisieran en verdad, él está diciendo su
verdad, porque es vocero de la burguesía, es vocero histórico, ese no es
un vocero de hoy solamente, es el vocero de ayer y de anteayer; es el
vocero de aquellos, de La Cosiata, es el vocero de quienes redactaron el
decreto expulsando a Bolívar de territorio venezolano, e incluso
después se dieron el lujo de enviarle al gobierno de la Nueva Granada,
una vez que Bolívar renunció al gobierno, rea Urdaneta el Presidente,
como sabemos, mandan una carta amenazando al gobierno de Nueva Granada, y
exigiéndole que impidiera la presencia de Bolívar en territorio
neogranadino porque era una amenaza para Venezuela. Hasta ahí llegó
aquella burguesía, aquella clase social a la que sabemos Bolívar
perteneció, porque él nació en cuna de oro. ¡Asss! Pero entendió, fue
tomando conciencia, quizás porque fue un niño huérfano de padre a los 3
años, huérfano de padre y madre a los nueve, y se hizo rebelde.
Yo
siempre estoy recordando algunos aspectos del juicio aquel, está
escrito, no lo inventé yo. Los que dicen que yo invento estas cosas yo
los invito a que vayan a leer un poquito, que estudien un poquito y
verán. El que tenga ojos que vea, el que tenga oídos que oiga.
El
joven Bolívar, el niño Bolívar. Ustedes saben que Bolívar celebraba su
nacimiento el 25, yo sólo que no me he querido meter más en
profundidades. Un día Fidel me dijo: “Chávez, a veces uno tiene que
dejar las cosas como están...”
Fidel
recibí tu nueva carta. Fidel me escribe ahora tres cartas diarias ¿ves?
Lo cual a mí me honra mucho. Aquí está la última que me llegó ayer en
la tarde, en un lote de tres ¿ves? Él las manda con un cuidado, un
sobre, una carpeta, otra, otro sobre.
“Querido
Hugo te escuché hoy por la tarde cuando hablaste en Guárico, sorpresa
total, pensé que lo harías en Barinas, buena táctica, el factor sorpresa
desconcierta la alianza nada subestimable de yanquis y oligarcas en
Venezuela. Supe así por esa vía que dentro de diez días cumplirás 58
años. Tenía alguna duda sobre el número exacto que sumarías en esa
fecha, pensaba que tal vez era 59. De todas formas ese día no te
felicitaré por el 58 aniversario, ya que desde ahora mismo lo hago con
el invariable y sincero afecto de siempre.
Creo
que yo era ya viejo cuando hice algunas cosas que muchas personas
atribuían simplemente a mi juventud. Ciertamente, es una vergüenza que
hubiese perdido tanto tiempo, cuando terminé el bachillerato, al que se
le añadió un año más hasta sumar doce, había cumplido ya 19, y no tenía
siquiera nociones de la disciplina y experiencia militar, tú en cambio
te habías graduado como oficial en la Academia Militar...”
No es así exactamente, yo me gradué a los 21, él habla de los 19, para que nos emparejemos ¿no?
“Menos
mal, sigue diciendo, que los mediocres políticos burgueses de Venezuela
admitían que un ciudadano a pesar de su condición social y origen
étnico, podía ser guardián del orden oligárquico (nosotros, pues)
confiaban que el dinero, los honores y el interés personal prevalecerían
en la institución militar de un país latinoamericano.
Durante
casi 200 años congelaron los sueños del Libertador, que esta vez
volvieron a tener vigencia plena sólo 210 años después, y cuando ya el
más poderoso imperio era dueño del mundo, 26 años tenía yo cuando el
golpe militar pro yanqui de Batista. Partiendo sólo de ideas invertí un
año, 4 meses y 16 días en organizar, entrenar y armar a los jóvenes
patriotas que atracaron los cuarteles de Santiago de Cuba y de Bayamo.
Cuando tú tenías la misma edad poseías ya un nivel de conocimientos
militares y políticos, en especial los que emanaban de las ideas de
Miranda, de Bolívar, y de toda una generación de patriotas que
escribieron una de las más brillantes historias del planeta en pro de la
libertad y la justicia para los pueblos oprimidos.
Me
asombra como aún hoy seguimos aprendiendo de ellos, especialmente tú
que representas al pueblo bolivariano en este instante singular de su
historia, 58 años no es nada Hugo, yo que tengo casi 28 más, he vivido
una parte importante de los últimos 100 años, puedo dar fe de lo que
significa el tiempo en esta época.
Honor
especial merece el pueblo venezolano por su inmensa capacidad de
comprender la hazaña que junto a ti lleva a cabo. No importa que mis
mensajes se acumulen, algún día quizás tengan determinado valor como
testimonio de esta época singular, que ambos pueblos, me atrevería a
decir, nuestro único pueblo, el de Bolívar y Martí está viviendo.
Hasta la victoria siempre. Fidel Castro. 18 de julio de 2012. 9:14 pm.”
—Aplausos.
Fidel,
gracias por ese mensaje, y en verdad tienes razón, es un solo pueblo el
nuestro, el de Martí, el de Bolívar, el de San Martín, el de Alfaro, el
mismo pueblo, todo este gran pueblo que hoy se ha levantado de nuevo,
se ha levantado de nuevo, el pueblo venezolano, el pueblo cubanos, los
pueblos de América Latina y del Caribe, y es bolívar. Fidel es un gran
bolivariano, fue y sigue siendo un gran estudiosos del pensamiento de
Bolívar, y él me contó un día que llegó a eso a través del estudio de
Martí, fue José Martí uno de los más grandes bolivarianos, aquí vino a
Caracas, y es famosa entre nosotros aquella historia, aquel viajero
antes de quitarse el polvo del camino, quiso ir a ver a Bolívar en la
plaza; después fue expulsado de Venezuela por el gobierno de Guzmán
Blanco, porque era un revolucionario José Martí, y se despide diciendo:
“Deme Venezuela en qué servirla, y tendrá en mí un hijo.”
Vamos
a decir hoy: Denos la América Latina, el Caribe en qué servirla, y
tendrá en nosotros sus hijos y sus hijas, los hijos de Bolívar, las
hijas de Bolívar.
—Aplausos.
Bolívar. Hoy te cantamos no el happy birthday to you. Fíjese, la música de nuestro cumpleaños:
(canta) Cumpleaños feliz. Happy birthday to you.
¿Te
das cuenta? No me quiero meter en profundidades. Fidel me decía un día:
“Chávez hay cosas que...” Y es verdad, el mismo Nietzsche. El mismo
Nietzsche dice que a veces uno tiene que ser como ciego, que a veces uno
debe tener capacidad de ciego, porque son tantas cosas que uno ve, que
no puede verlas todas, o que quiere verlas todas ¿no? Estaba hablando de
eso cuando hablaba ¿de qué era Diosdado? Del cumpleaños de Bolívar
¿ves?
Yo
no es que esté diciendo que Bolívar nació el 25, no, sólo lean el
Diario de Bucaramanga. Y él le dice a Perú de la Croix, Miguel. ¿Tú
leíste ese libro Miguel? Tú no lees mucha historia, tú lees matemática y
ciencia.
Tú sabes Miguel lo que Fidel le mandó a decir por ahí en otra carta, me estaba hablando del viaje a Marte.
¿Tú sabes que hay un grupo de personas preparándose para el viaje a Marte, Miguel? Préstale el micrófono, ¿tú sabías eso?
Miguel Alejandro Ramírez: No.
Presidente Chávez:
¿No? Te voy a mandar... Voy a decirle a Fidel que te mande alguna
relación más detallada. De todos modos aquí pudiéramos también
averiguar, los científicos nuestros ¿no? Se está preparando un viaje a
Marte. Arreaza ¿tú vas para allá? El ministro de Ciencia y Tecnología.
¿Sabes algo de eso Jorge? Averíguate. Fidel me dijo: “Chávez averíguate,
se está preparando un viaje a Marte...” Como que son dos años de viaje,
un año de permanencia allá, y dos años más, algo así, de retorno, a no
sé cuánta velocidad, incluso Fidel está sacando la cuenta de qué va a
comer esa gente en el trayecto ¿no? Pero Miguel no lee mucho de historia
¿no Miguel? Tú lees esas cosas de la ciencia.
Miguel Alejandro Ramírez: Sí.
Presidente Chávez: ¿Sí te gusta la historia?
Miguel Alejandro Ramírez: Sí, un poco.
Presidente Chávez: ¿Qué es lo que más te gusta leer a ti?
Miguel Alejandro Ramírez: Las ciencias.
Presidente Chávez: Bueno, la historia es una ciencia también, pero entiendo, la ciencia matemática...
Miguel Alejandro Ramírez: Matemática, química y física.
Presidente Chávez: ¿Ya tú sabes integrar, derivar y todo eso?
Miguel Alejandro Ramírez: Un poco.
Presidente Chávez: Un poco ¿ves?
¿Y de la química tú sabes las cadenas de los hidrocarburos y todo eso?
Miguel Alejandro Ramírez: Sí, los que son hidrocarburos alifáticos.
Presidente Chávez: ¿Cuál es el butano?
Miguel Alejandro Ramírez: El butano, el que tiene 4 carbonos y tiene 8, 10 hidrógenos.
Presidente Chávez: Diez hidrógenos. O sea, C4H10.
Miguel Alejandro Ramírez: H10.
Presidente Chávez: ¿Y el propano? C3H...
Miguel Alejandro Ramírez: C3H.
Presidente Chávez: 10 ¿no es?
Miguel Alejandro Ramírez: No, 8.
Presidente Chávez:
H8. Estábamos anteayer estudiando eso de la química orgánica, porque
estábamos inaugurando una planta, tú sabes, de 1-Buteno, el 1-Buteno.
¿Por qué es el 1-Buteno?
Miguel Alejandro Ramírez: 1-Buteno es porque en el primer carbono se encuentra en enlace doble.
Presidente Chávez: ¡Te das cuenta!
—Aplausos.
El
enlace doble. Fíjate, estábamos estudiando, yo estaba estudiando un
poco, recordando mi química orgánica, que yo no fui nada bueno en
química orgánica en quinto año de bachillerato, y me estaba explicando
Asdrúbal, que es ingeniero químico, sobre todas esas cadenas ¿no? (¿Por
qué le quitaste el micrófono?) todas esas cadenas de los hidrocarburos, y
fíjense ustedes lo que es la maravilla Miguel, el gas que está bajo la
tierra, fíjate, una riqueza incalculable, y cuando nosotros éramos
colonia, que lo fuimos pues. La independencia, Miguel, que Bolívar
logró, se perdió, se perdió, se la llevó el viento, y él mismo lo
entendió al final, al final de su vida: “No hay Patria, está disuelta,
habrá que reunirla de nuevo por las armas, y me ofrezco para lo más
difícil...”
Ahora,
se perdió la independencia y nos cayó el imperio yanqui, que ya Bolívar
en una demostración más de su infinito genio, y esta frase es de Fidel
también, más o menos me dijo: “Chávez, 1820 era casi imposible
visualizar el imperio yanqui en 1820, Bolívar lo presintió, lo olió, lo
olfateó...” Y él escribe aquella frase: “Los Estados Unidos de
Norteamérica parecen destinados por la Providencia a plagar la América
de miserias a nombre de la libertad...” Bolívar, 1820 por ahí,
increíble, increíble. A los pocos años estaban invadiendo a México, y le
quitaron la mitad de su territorio, sobre todo donde está el petróleo,
las grandes riquezas de petróleo.
Y
aquí vinieron también Miguel, derrocaron a un general Presidente que
era de por allá de los Andes donde tú naciste hijo, Cipriano Castro,
hace como 100 años, aquí mismo en esta casa, lo derrocaron, y luego le
impidieron retornar a Venezuela, le hicieron la vida imposible, hasta lo
ridiculizaron en la prensa internacional, y detrás la burguesía
criolla, no sería el sobrino octavo, en ese tiempo sería como el sobrino
quinto, o sobrino cuarto ¿no? La línea de los sobrinos de Bolívar, va
por el octavo ¿ves? El primero fue aquel cobardón y corrupto, después
terminó siendo un gran ricachón y amiguísimo aquí de la burguesía.
Bueno, no amiguísimo, miembro de la burguesía venezolana, Fernando
Bolívar, el sobrino primero, ya va por 8, hay que tener cuidado con esa
línea de sobrinos, hay que estudiar, ustedes que estudian la ciencia,
científicamente hay que estudiar eso.
Entonces,
Miguel, fíjate, derrocan a Cipriano Castro, le impiden volver a
Venezuela, murió en Puerto Rico, allá murió, enfermo, quería retornar,
no pudo, y entonces imponen a un dictador nacido también por allá en los
Andes. ¿Sabes cómo se llamó Miguel? Juan Vicente Gómez, y gobernó... No
gobernó él en verdad, no, Gómez fue un títere, un cachorro de la
burguesía, Gómez era un hombre de dinero. Castro no. Desde entonces,
desde joven Gómez era ganadero, comerciante entre Colombia y Venezuela,
tenía haciendas ¿ves? Un hombre de negocios, y muy rico, y se hizo
infinitamente más rico aún de Presidente pues, pero le entregó Venezuela
a los yanquis, él dio las concesiones aquellas por 50 años a las
grandes transnacionales, y lo mantuvieron ahí, lo mantuvieron, le
apoyaron mucho, bueno, era el que garantizaba el gobierno con la más
grande represión, una tiranía pero verdaderamente terrible la de Juan
Vicente Gómez ¿ves?
Y
bueno, se llevaron tanto petróleo, y quemaron el gas, el gas, lo
quemaban porque no les interesaba, se llevaban petróleo, el liviano, de
ahí de la cuenca del Lago de Maracaibo. Se llevaron tanto petróleo,
Miguel, que se hundió la tierra. La Costa Oriental del Lago se ha
hundido como 8, 9 metros, todavía estamos haciendo ciudades para
trasladar barrios enteros de la Costa Oriental del Lago.
Ahora
nosotros hemos comenzado, ahora que somos independientes, hemos
comenzado a capturar el gas, no a quemarlo. Entonces vean ustedes lo que
es la ciencia, el gas que está bajo la tierra, asociado al petróleo o
no, gas libre, se saca y se convierte en líquido, se le extraen los
líquidos, y de ahí vienen las líneas del buteno, el propano, el
polipropileno ¿no es¿ ¿Qué más? ¿Cuál es el otro? El etileno...
Miguel Alejandro Ramírez: El metano.
Presidente Chávez: El metano, ese es el gas más elemental porque tiene un solo... ¿Cuántos carbonos tiene?
Miguel Alejandro Ramírez: Uno solo.
Presidente Chávez:
Uno solo ¿ves? Uno solo. Ese es el gas que viene para las cocinas; el
gas que viene para los vehículos; el gas que viene para las
termoeléctricas, porque no tiene líquido, es un gas que no es rico como
el gas que viene asociado al petróleo, que es un gas, el gas rico, se le
extraen los líquidos, y luego se convierten en sólidos, los plásticos,
los fertilizantes. Bueno, estamos haciendo petrocasas que vienen del
gas, es increíble eso, si uno estudia bien lo que es la ciencia ¿ves
Miguel?
Miguel Alejandro Ramírez: ¡Ujú!
Presidente Chávez: Muy bien, gracias hijo, te voy a mandar un librito de historia. Te voy a mandar El Diario de Bucaramanga, se lee sabroso.
Entonces
ahí Bolívar le cuenta a Perú de la Croix, que él celebró siempre el 25
su cumpleaños, porque había nacido... en otra carta dice que él nació en
la noche, tarde.
Y
ustedes saben que incluso, no digan que es que yo lo estoy afirmando,
no, pero como a mí se me agarra y se me tergiversa mucho: “Chávez dijo
que Bolívar...” No, no. Hay una versión, está escrita también, que dice
que Bolívar no nació en Caracas, sino que nació en un pueblito muy
bonito de Barlovento, llamado Capaya.
Si
tú vas a Capaya y le preguntas a cualquiera allá, desde los niños hasta
los ancianos, ¿dónde nació Bolívar? Te dirán, aquí en Capaya. Ellos no
pelean con nadie, pero para ellos nació allá en Capaya, y es más, te
explican por qué, y dicen que había un libro muy viejo en la iglesia,
que un cura lo quemó, el libro, o se lo llevó, le arrancaron una página,
correcto, que se perdió la página, y que ahí estaba la prueba. ¿Cuál es
la prueba? Que doña María de la Concepción Palacios y Blanco, la madre
de Bolívar, en avanzado estado que llaman ¿cómo es? De gravidez ¿no?
Apadrinó a un niño que nació en esos días en Capaya, faltando 2 o 3
días, o pocos días para el 24 de Julio, y ellos dicen que venir de
Capaya a Caracas en ese tiempo era una jornada, y más aún en invierno,
en pleno julio, los ríos crecidos, los caminos intransitables, que cómo
esa mujer a punto de parir iba a venir a Caracas a parir ¿ves?
Y
en verdad los Bolívar tenían una hacienda en Capaya, y allá
vacacionaban, eso sí es verdad, verdadita pues, una hacienda en Capaya, e
incluso dicen todavía, y lo cuentan como si ellos lo hubieran visto,
porque es la tradición oral ¿no? Que vieron a María de la Concepción
cuando salió por detrás, no sé qué, y la montaron en un carruaje varias
semanas después cuando el río bajo, y trajeron al niño y lo presentaron
en Caracas, y entonces nació en Caracas. Pero dicen, no es que lo diga
yo, dicen por ahí que nació en Capaya ¿ves? Y Bolívar tenía rasgos
también negroides, afrodescendientes, para ser más exactos ¿ves? Y está
en su genética pues; claro, el sobrino octavo no le queda nada de eso.
Por la línea de los sobrinos no le queda ni una gotica de eso ¿no? Pero
bueno, Bolívar era así, era mestizo, pues, era mestizo, como lo era Piar
también.
Ayer
estábamos con el ministro Julio de Vido mirando el retrato de Bolívar
que está allí en el Despacho presidencial ¿ves? Y en verdad uno se pone a
mirar y es un hombre como de dos metros, según las proporciones del
cuadro, y Bolívar medía era 1,65 ¿verdad? Y en otros cuadros lo pintan
casi que catire, ojos azules; como a Piar. De ahí el libro de Herrera
Luque, “Piar, caudillo de dos colores”. Era mestizo Piar. San Martín era
indio, pero lo pintan también blanco y ojos verdes.
Esa
es la manera como las burguesías y sus intelectuales, y hasta sus
pintores, se prestaron para transformarlos a muchos de nuestros héroes,
hasta transformarlo físicamente en la memoria histórica. Por eso es que
bueno, miren, miren ese rostro.
Bolívar
dijo una vez: “Hasta la España deja de ser europea por su sangre
africana...” Porque él se reconocía también con sangre africana. “Hasta
la España deja de ser europea por su sangre africana...” Míralo, ahí
está, una prominente nariz.
¿Qué dirían ustedes, alguno de los doctores, doctoras?
Lourdes Pérez:
Es una nariz leptorrina, la ancestría del Libertador era mestiza con
tendencia caucasoide, y el prognetismo que se puede observar a nivel del
maxilar superior, denota el mestizaje del cual hace referencia usted.
Vemos...
Presidente Chávez: Y además... ¡Ah, perdón!
Lourdes Pérez: Vemos como los tejidos blandos que reflejan reconstrucción facial lo que hacen es atenuar esa característica.
Presidente Chávez:
¡Ujú! Y se ve, más no se ve, se percibe como una persona (esto es muy
obvio lo que voy a decir) de una fuerte contextura física ¿verdad?
Lourdes Pérez:
Los restos óseos eran con una tonicidad muscular de inserciones
bastante fuerte, a pesar de que era delgado, y las proporciones del
cuerpo, superiores, lo que son las extremidades superiores, mucho más
largas que el resto del cuerpo, las extremidades inferiores.
Presidente Chávez:
Ustedes determinaron... yo me di cuenta mirando y le dije a mi hija,
mira, mira esas piernas, cuántos años a caballo, el arqueo de los dos...
Lourdes Pérez: Las
diáfisis de los fémures, ambas tenían arqueamiento a nivel de la parte
interna; eso es propio de sujetos que montan de manera asidua a caballo.
Presidente Chávez: Un hombre a caballo pues.
Lourdes Pérez: Igual el sacro denotaba esa característica.
Presidente Chávez:
También leí en otro informe por ahí, de tantos que ustedes han
elaborado, de que en la dentadura parece que él usaba... como las
personas que se colocan un palillo entre dos dientes, algo así, y quedó
como un rastro ¿no? Doctora.
Doctora:
Sí, tiene las características del lado derecho en la parte inferior, a
nivel de los incisivos y caninos, de una media luna, generalmente si nos
venimos a esta época, pues generalmente lo hacen los talabarteros, los
carpinteros, lo escritores, que se colocan por largo tiempo algún
material ajeno totalmente a la boca, pero el mismo hecho de estar tanto
tiempo provoca como un desgaste en semi luna. De hecho él tenía también
grandes desgastes en los bordes incisales, y su caras o cruzales, lo que
demuestra un gran temperamento, las personas que generalmente frotan
sus dentaduras cuando tienen largo tiempo pensando, o cuando la mente
vuela y uno simplemente aprieta los dientes como una manera de evadir
entre tantos pensamientos, pues y se forman esa capa de desgaste, y él
lo tenía más acentuado en la línea del canino a nivel del lado derecho.
Como se ve, esa persona o se presume que cabalgaba largo tiempo y se
sostenía entre esos dientes, pudiera ser para aquella época un palito de
madera, o una... como algo que él ponía ahí por largo tiempo, lo que
hizo esta muestra que la vimos pues.
Presidente Chávez: Muchas gracias, doctora.
Doctora: Gracias.
Presidente Chávez:
José Antonio Páez en sus memorias, él describe a Bolívar en varias
partes, dice que le gustaba... cuando Bolívar fue al Apure, 1818, y se
consiguieron en Cañafístola, y bueno, y luego estuvieron juntos varios
meses en aquella guerra, Bolívar vio con sus propios ojos la saña de Las
Queseras del Medio, cuando Páez se lanza a caballo al Arauca, con 150, y
cruzan el río y atacan al mismo Morillo que estaba ahí, lo sorprenden, y
es cuando Páez dice: ¡“Vuelvan caras...!” y destrozó la caballería de
Pablo Morillo, y Bolívar vio, y Bolívar estaba del lado allá del río, el
lado sur del río. Pero Páez escribe en su memoria: “Bolívar gustaba
galopar libre por la sabana...” Y competía, ¿quiénes son los mejores
aquí? Y saltaba, tenían una forma de apostar a ver quién saltaba sobre
el caballo, corriendo y saltando por detrás del caballo, por encima de
la cabeza y caer adelante ¿no? Parece que él se dio un buen golpe un día
contra la cabeza de un caballo, saltando.
Y
también dice Páez que a veces cantaba canciones patrióticas en las
largas marchas, o que iba en silencio, con un mutismo, pensativo, sobre
el caballo. También dice que era muy adicto a las damas. ¿No sintieron
ustedes algún influjo especial allí?. Era un enamorado sin remedio,
Bolívar.
Bueno,
por cierto aquí tengo una carta, y hace poco estaba recordando hablando
con Arias Cárdenas en el Zulia, el relámpago del Catatumbo ¿por qué?
Porque en la carta que él le manda a Fanny Du Villars, a su prima Fanny,
fechada en Santa Marta el 6 de diciembre, aún no había entrado en el
estado ese ya final, de la agonía ¿no? Él escribe esta carta, una carta
sublime, pero él le dice allí, al final le dice: “Adiós Fanny, todo ha
terminado, juventud, ilusiones, risas y alegría se hunden en la nada,
sólo quedas tú como ilusión serafina señoreando el infinito, dominando
la eternidad...” Parece que él amó mucho a aquella mujer, en su
juventud, allá en París, Fanny Du Villar ¿ves? Y le contó, incluso Fanny
le escribe varias cartas, están él ya aquí ¿no? Quiso venir, él le dijo
que no, que mejor se quedara por allá Fanny. Pero fíjense lo que le
dice al final, doctora Tibisay: “Me tocó la misión del relámpago, rasgar
un instante las tiniebla, fulgurar apenas sobre el abismo y tornar a
perderse en el vacío...”
Hoy
habría que decir más bien, entendiendo el sentimiento de aquel hombre
ya, despidiéndose ¿no? Y como él mismo lo dice por ahí: “Qué puede un
pobre hombre contra el mundo...” Te tocó la misión del relámpago, es
verdad, pero la misión del relámpago del Catatumbo, que nunca se pierde
en ningún vacío, el relámpago del Catatumbo.
—Aplausos.
Ese
relámpago yo me atrevo a sugerir, que, respetando su nombre histórico
geográfico y el sentido que tiene del Catatumbo, sí. Pero ese relámpago,
así como dice Neruda: “Todo lleva tu nombre Padre, el Huracán Bolívar,
el Pájaro Bolívar, el Relámpago Bolívar....” Ese es el del Catatumbo.
Así lo llamaré yo, el relámpago Bolívar del Catatumbo pues, ese es
Bolívar, el relámpago, el relámpago que no termina nunca.
—Aplausos.
El relámpago, como decía Asturias: “La lucha que no termina.” El relámpago que no termina.
Aquí
hay otro escrito hermoso, porque como es cumpleaños es canto ¿verdad?
Es un canto a Bolívar, es un canto, son los recuerdos en honor a ese
niño que nació un día como hoy aquí en Caracas ¿verdad? En la gran
Caracas pues ¿no? Nació en Caracas. Eso no tiene ya importancia, en
verdad, a estas alturas. Porque como un día me dijo Bouteflika, el
presidente argelino cuando venía, como vino, a la Cumbre de Margarita, a
la cumbre africana suramericana que ahora estamos retomándola porque la
próxima cumbre iba a ser en Libia ¿no Nicolás? Gaddafi vino a esa
cumbre, como recordamos, vino Bouteflika, vinieron más de 20 Presidentes
africanos, y casi todos los Presidentes de América del Sur, todos, eso
alerta las luces del imperio ¿ves? Y eso tiene relación con la agresión
contra Libia y contra el África, sin duda, no hay duda. Ahora estamos
rebuscando con Dilma y otros compañeros africanos, ahora eligieron
secretaria de la Unión Africana a la compañera Zuma, una buena amiga,
valiente mujer, que luchó junto a Mandela contra el Apartheid y la
liberación de Suráfrica.
Bueno,
África, continente madre, América, América del Sur, ahí estamos. Hay
alguna tesis que dice Miguel, que eso fue un solo Continente, tú
sabes...
Miguel Alejandro Ramírez: Sí...
Presidente Chávez: ¿Ah?
Miguel Alejandro Ramírez: El continente llamado Pangea.
Presidente Chávez: ¡Te das cuenta!, ¿ves? Que era un solo continente pues, África y América del Sur que estábamos unidos.
Miguel Alejandro Ramírez: ¡Ujú!
Presidente Chávez: ¿Sí? Tú has leído eso también ¿no?
Miguel Alejandro Ramírez: Sí, la teoría de la deriva continental.
Presidente Chávez:
Correcto ¿ves? Este muchacho es bachiller ya y tiene apenas 13 años, y
es bachiller, hoy le vamos a entregar el título ¿no es? ¿No Maryann? De
bachiller.
¿Y cuándo comienza en la universidad Miguel?
Miguel Alejandro Ramírez: En septiembre.
Presidente Chávez: ¿Qué vas a estudiar?
Miguel Alejandro Ramírez: Química pura.
Presidente Chávez: Más nada pues.
—Aplausos.
Química
pura. Y con la química pura te sugiero que estudies también la Patria
pura ¿ves? Que te vayas haciendo un químico puro y un patriota puro
¿sabes muchachito, muchachito genio? Muchachitas y muchachitos, la
Patria nueva.
¡Hola gorda bella! Me estás mirando muy bonito.
Allá
están unos muchachitos que van a recibir la Canaima también ¿no es?
Este acto es largo, vale, vamos a entregar 1.800.000 van ¿no? Canaima,
Canaimita.
Bueno, vamos a ir concluyendo.
Víctor
Salazar, un poeta venezolano poco conocido, deberíamos difundir más
estos poetas, estos poetas venezolanos, Víctor Salazar, un impresionante
poema escrito por allá por los años 70, cuando ya el puntofijismo
estaba consolidándose pues, consolidado y explotando este pueblo a
nombre de la democracia. (Llegó Farruco. Farruco ¿qué tal?) El poema se
llama “Tengo algo que decir desde este río, Bolívar”, y una parte dice
así: “Aquí donde la entraña de la tierra soporta los rigores del “Látigo
Bolívar”, los hombres han negado tu manantial de sueños; los ídolos de
arcilla dan a beber tu nombre, sólo en páginas, fechas,
irremediablemente calcinadas, pero tú sigues, hablas desde el
interrogante verano de los pobres...” El interrogante verano de los
pobres.
Nunca
olvidaremos Diosdado, el 4 de febrero, y cuando me correspondió
hablarle al país aquellos segundos, ya hecho prisionero, yo no sabía ni
lo que iba a decir, me presionaban algunos generales para que yo
escribiera primero y saliera leyendo. Y yo, no, no, con mi palabra está,
yo estoy ya rendido, y quiero llamar a rendición a todos mis hombres
que están regados por ahí muchos, en Valencia, en Maracay, en el Zulia,
aquí mismo en Caracas ¿ves? La tropa bolivariana estaba regada en las
calles, y yo ya hecho prisionero dije, bueno, yo voy a llamar a
rendición, pero ¿cómo me comunico con ellos? Permítanme hablar con ellos
por teléfono, por radio. Y al final a alguien se le ocurrió llamar a
los medios de comunicación, y entonces yo recuerdo clarito, cuando
comienzo a hablar, a hablar, y a hablar, y digo al final: yo asumo la
responsabilidad por este movimiento militar bolivariano, bolivariano. Y
bueno, y tenía que ser así.
Venezuela estaba casi que totalmente rendida, un pueblo alzado pero masacrado y perseguido.
Fidel,
otra vez Fidel, me dijo un día: “Chávez nosotros lanzamos el 26 de
Julio el asalto al Cuartel Moncada...” Es decir, un grupo de jóvenes
asaltando a un cuartel allá en Santiago de Cuba. “Pero ustedes lo que
hicieron allá fue magistral, me dice, genial, ustedes hicieron como 100
Moncadas pero desde dentro, desde dentro, al revés, salieron de los
cuarteles...” ¿ves? Los hijos de Bolívar hecho soldados. ¿Que algo
teníamos que hacer? Éramos, sí... Alguien dijo una locura. Bueno, sí,
está bien, una locura, pero locura de amor, de amor patrio, y luego este
camino ¿ves? Este camino, y él al frente, él está al frente, es Bolívar
el comandante, es Bolívar el comandante.
Uslar
Pietri escribió: “Cuando Bolívar llegó a Carabobo... No, cuando el
camino llegó a Carabobo iba Bolívar adelante y obligaba mucho...” Ciento
y tantos años después dice el gran escritor Arturo Uslar: “Bolívar está
detrás de nosotros, y el compromiso no ha hecho sino crecer...”
Yo
sólo diría algo distinto, no es que está detrás de nosotros, Bolívar
está delante de nosotros, y obliga mucho, sigue obligando mucho, sigue
obligando mucho...
—Aplausos.
A
partir de hoy tu rostro verdadero, rescatado por las manos amorosas de
tus hijas científicas, y tus hijos científicos, brillará mucho más,
porque ya sabemos con precisión, y recibimos con intensidad infinita la
luminosa presencia de esa mirada, de ese rostro vivo, que vive y vivirá
para siempre en esta lucha, en esta Patria.
Bueno, vamos a proceder, por una parte nos queda, Elías, presentar... Explícanos Elías por favor, el archivo digital de Bolívar.
Elías Jaua: Va usted a hacer entrega de la Canaima un millón ochocientos, y allí vamos a abrir el archivo digital en la pantalla.
Presidente Chávez:
Bueno, entonces ¿quién recibe la Canaima? ¿Los niños? Uno de los niños.
A ver, y que vengan todos los niños pues, que vengan todos los niños,
vengan todas las niñas y los niños.
¿Cómo es que tú te llamas?
Niña, Aydana: Aydana.
Presidente Chávez: ¿Aydana?
Niña, Aydana: Sí.
Presidente Chávez: Aydana.
¿Qué grado estudias?
Niña, Aydana: Pasé para sexto.
Presidente Chávez: ¡Vengan, vengan, vengan! ¿Pasaste para...?
Niña, Aydana: Sexto.
Presidente Chávez: Para sexto. ¿Dónde está la Canaima?
—Aquí está comandante.
Presidente Chávez: La Canaima.
¿Tú tienes Canaima? ¿No? ¿Y por qué no tienen todavía Canaima?
Niña, Aydana: Porque yo pasé para primer año.
Presidente Chávez: ¡Tú pasaste para primer año! Pero mira ésta pasó para primer año.
Ven Maryann. ¿Dónde está Maryann? ¡Ajá! ¡Hola Maryann, hola Jorge!
Ministro, Jorge Arreaza: El año que viene.
Presidente Chávez: El año que viene te toca a ti, porque pasó para primer año esta muchacha.
Maryann Hanson: Tiene un poema Presidente.
Presidente Chávez: ¿Quién?
Maryann Hanson: Andrea.
Presidente Chávez: ¿Tú tienes un poema Andrea? Dilo pues.
A
ver, de la vuelta por aquí, den la vuelta así, para que no le demos la
espalda al público, por favor. Ven compadre. Andrea ven.
Niña, Andrea: Lo inventé ayer en la noche.
Presidente Chávez: ¡Ajá!
Niña, Andrea:
Venezuela, cuna de libertadores, hoy se llena de emociones en este acto
tan bonito, y por el natalicio de Simoncito, el héroe de la Patria, y
libertador de Naciones.
Hoy
quiero desearle bendiciones a otro héroe, que es el presidente Hugo
Chávez, que se ha esforzado por ayudar a los pobres, y hacer que
Venezuela sea uno de los países triunfadores.
Y me despido con las ansias de volver a declamar.
Mi nombre es Andrea Narea, y hasta otra oportunidad.
—Aplausos.
Presidente Chávez: ¡Bravo! ¡Linda!
¿Quién recibe? ¿Tú? Bueno, saca tu Canaima, tú pasaste para sexto.
Este
año comenzamos la dotación a todos los sextos grados, quinto grado. ¿Y
sexto? Ah, claro, quinto grado. ¿Pero terminamos ya quinto grado? Este
año cerramos el ciclo de toda la primaria, de segundo a sexto, y luego
empezaremos a entregarle a la educación media. Sí, pero continúa el
ciclo de primaria, los que pasan a segundo grado reciben, y ya va
corriendo la serie.
Bueno, te entrego tu Canaima pues.
Niña, Andrea: Gracias en nombre de todos los niños de Venezuela, por este aporte que nos ha dado todos estos años.
—Aplausos.
Presidente Chávez: Ella tiene diez años ¿ves?
Niña, Andrea: Yo en mi escuela practico quiquimbol, estoy en la selección y ganamos.
Presidente Chávez: ¿Y voleibol no te gusta?
Niña, Andrea: También me gusta.
Presidente Chávez: Porque tú... Mira, tú vas medir más o menos, tú vas a llegar como aquí, si tienes 11 años, mira, por aquí más o menos.
Ustedes
saben que, ustedes los científicos saben más que yo esto, pero producto
de los avances de la revolución, y de los éxitos del pueblo, la
estatura de nuestras niñas y niños ha crecido dos centímetros, en una
década ¿oíste Miguel? Ven Miguel, ven acá que tú eres un niño también,
lo que pasa es que tú... ¿A? ¿Qué dijo? Es un adolescente, está bien, un
adolescente ¿verdad? Está bien.
—Risas.
Ven
Miguel. ¡Y vaya qué adolescente! Ven Miguel. ¿Y la mamá de Miguel dónde
está? Ven acá pues. ¿Y el papá? ¿Está ahí tu papá? ¿Cuándo se van
ustedes para allá para la montaña?
Miguel Alejandro Ramírez: Bueno, posiblemente mañana o si no el jueves.
Presidente Chávez: Posiblemente.
Miguel Alejandro Ramírez: ¡Ujú!
Presidente Chávez: ¿Cuántos días tienen por ahí ya?
Miguel Alejandro Ramírez: Llevamos casi el mes y medio.
Presidente Chávez: ¡Mes y medio! Ya extrañas allá a Bailadores ¿no? Y las muchachas de Bailadores.
Miguel Alejandro Ramírez: Pues sí
Presidente Chávez: Las muchachas de Bailadores.
¿Ella es tu hermana? Igualita, mira. ¿Sí? ¡Hola! ¿Y tu mamá? Yo las vi por televisión.
¿Cómo está señora? ¿Cómo estás mi vida? ¿Cómo te llamas tú?
Hermana del niño genio, Karen Zenaida Ramírez: Karen Zenaida.
Presidente Chávez: Karen Zenaida, son igualitos los dos.
¿Y tú compadre, de Bailadores también? Acompáñanos aquí por favor. Ya terminando este acto.
—Un regalo.
Presidente Chávez: ¿Un regalo para quién? Para ti.
Niño: Gracias.
Presidente Chávez: Entonces los niños están siendo ahora...
—Aplausos.
Bueno. Gracias hijo.
—Aplausos.
Miren,
la alimentación, la alimentación, eso es vital ¿verdad? Para el futuro,
por eso Bolívar, Bolívar, por eso estamos oyendo lo que ustedes están
explicando, fue un niño que tuvo buena alimentación.
Ahora,
todavía en Venezuela hay, todavía tenemos, rastros dolorosos de lo que
fue la época neoliberal, todo lo que fue... Bueno, todo lo que fue el
siglo XX ¿ves? La desnutrición.
Eugenia
Sader está por ahí. Yo estaba revisando anoche indicadores de salud,
porque yo me la paso estudiando, una de las cosas que más hago es
estudiar, y revisar datos y preguntas, y jurungar y tal.
En
esta década ¿qué ha pasado? La mortalidad infantil por desnutrición ha
disminuido cerca de 80 por ciento. Eugenia ¿tú tienes la cifra grabada?
El micrófono no tiene volumen.
Eugenia Sader: 79.4 por ciento.
Presidente Chávez: 79.4 en una década ¿ves? Estábamos en algo así como 80...
Eugenia Sader: Y quedamos en 20 y algo...
Presidente Chávez: Era cerca de 80 por...
Eugenia Sader: Por cien mil.
Presidente Chávez: Por cien mil.
Eugenia Sader: Niños nacidos vivos.
Presidente Chávez: ¿Por cien mil, o por mil?
Eugenia Sader: Por cien mil. No, ahora me confundí.
Presidente Chávez:
Verifica bien, verifica bien, porque creo que es por cada mil ¿no? Por
cada mil nacidos vivos que mueren antes de un año por causa de
desnutrición. Creo que son los... los... ¿Por cien mil?
Eugenia Sader: Sí, 100 mil.
Presidente Chávez: ¡Ah! Correcto. Entonces yo tenía la... Lo que se mide por mil es la mortalidad general infantil. Correcto.
Pero en este caso es mortalidad ¿por causa de...?
Eugenia Sader: De desnutrición en menores de 1 año.
Presidente Chávez: De desnutrición ¿ves?
Entonces
ha bajado, y esa es la cifra digamos gruesa, casi 80 por ciento. Claro,
las políticas alimentarias, y no sólo para los niños, las madres. Hay
que ver las mujeres, bueno como tú, de allá del campo, como mi madre,
del campo. ¡Cuánto, cuánto, cuánto esfuerzo! ¡Cuánta miseria había aquí
en Venezuela! Y todavía hay. Por eso es que esto no ha terminado. No.
Basta caminar un poco para darnos cuenta, como me decía Yadira anoche,
la ministra Yadira, bueno todavía tenemos nosotros varios centenares de
miles de niños y niñas que están fuera de la escuela, estando en edad
escolar.
Pero
yo les digo, Elías, tenemos que ir hasta la montaña más alta y lejana,
allá tiene que ir aunque sea un maestro en burro, a llevarle educación a
ese niño. Sí. Y de preescolar y primaria.
Entonces
todavía la batalla es muy dura, pues. Y sobre todo que hay momentos en
los cuales, hay un momento en el cual chocamos contra el piso duro,
contra bolsones duro de pobreza, de miseria, pero hay que luchar
entonces más duro, concentrar más esfuerzos, para romper esos bolsones e
incluir a todos, e incluir a todas.
Anteayer
estábamos en la Costa Oriental del Lago, y hay un niño que está mirando
la caravana, íbamos apurados, pero yo iba mirando, me paré en varias
partes. Pero hay un niño, un niño así como tú, pero catirito, así ¿ves?,
parado en la orilla de la carretera mirando, mirando. Y yo le voy
pasando por un lado, y yo sé que él me está es buscando a mí, bajo el
vidrio y le digo: ¡Hola! Ven acá. Y vino. Pero con una seriedad plena, y
una mirada: ¡Chávez! Como si me estuviera esperando ahí hacía mucho
tiempo, como viejos amigos, y le doy la mano, nos damos la mano.
¿Y tú qué haces ahí?
Me dice: “No, mi papá está allá, vende café y mamones...”.
¿Y dónde vives?
—Allá en aquel ranchito.
¿Y tu mamá?
—Está en Caracas—, me dijo.
¿Y cuántos hermanos son?
—Cuatro.
Un
ranchito, un ranchito de tablas, pues, cerquita de los Puertos de
Altagracia, por ahí. Para que veamos que todavía hay mucho, mucho, mucho
por hacer; para que en pocos años todos los niños y niñas sean así como
ustedes, felices, bien alimentados, que estén estudiando, aprendiendo,
creciendo. Pido a Dios que así sea, pido a Dios que así sea. Y que le
demos Patria, verdadera Patria a todos y a todas. Inclusión. Y eso sólo
podemos lograrlo por este camino.
Es
de Bolívar la frase, no estará por ahí, ¿ya tenemos el archivo
digitalizado en Canaima? Ustedes pueden estudiar a Bolívar por la
Canaima. ¿Te das cuenta? Buscan el archivo ahí.
Hay
un pensamiento de Bolívar de una carta que le escribió él a Santander,
por ahí está la fecha Escalona, para ayudar allí a los que están
ubicando en pantalla ¿no?, de una carta de Bolívar a Santander, donde le
dice: “El impulso de esta revolución ya está dado, nada podrá
detenerlo. Lo que tenemos que hacer es darle la mejor dirección. Sólo
por el camino de la revolución obtendremos éxito, por ningún otro
camino...”. Hoy esas palabras de Bolívar tienen todavía más razón: Sólo
por el camino de la Revolución, democrática y pacífica, y el socialismo,
tendremos éxito en que todos los venezolanos y venezolanas obtengan una
calidad de vida digna, y podamos decir que todos vivimos viviendo, para
insistir en esa frase: vivir viviendo.
Y
ese es el reto del Bolívar que nace cada día. Porque tú también eres
Bolívar, tú eres Bolívar. Seamos como Bolívar. Ustedes son los hijos de
Bolívar. Mejor es ser hijo de Bolívar, que sobrino octavo de Bolívar.
Ustedes son los hijos y las hijas de Bolívar. ¡Las hijas de Bolívar!
—Aplausos.
Hijos
verdaderos del semillero que sembró Bolívar. Míralo. ¿Qué les parece el
rostro de Bolívar? ¿Tú lo habías visto?, ¿verdad que no? ¿Qué te parece
el rostro de Bolívar? Mira.
Miguel Alejandro Ramírez: Está muy bien.
Presidente Chávez: Muy bien. Míralo, ¿ves? Fíjate su mirada, mira. ¡Simón Bolívar! Parece que lo tuviéramos aquí con nosotros.
Bueno, ¿qué nos falta, Elías? Este acto largo.
Elías Jaua: Entregar el...
Presidente Chávez: ¡Ah! El título.
Elías Jaua: Firmárselo y entregárselo.
Presidente Chávez: Título de Bachiller de Miguel Ramírez. ¡Ajá! Este es el título.
Maryann Hanson: Y lo debe firmar aquí.
Presidente Chávez:
Pásame los lentes ahí para yo ver aquí. Mira, las notas de mi compadre,
parecida a las de Escalona. ¿Ah, Miguel? Fíjate, está bien.
Tercer año:
Castellano:
19. Inglés: 20. Matemática: 20. Biología: 16. Física: 20. Química: 18.
Historia: 20. Oye, sacaste 20 en Historia ¿ah?
—Risas.
Geografía: 17. Educación física: 19. Educación para el Trabajo: 20. Este es tercer año.
Y quinto año. ¡’Na guará, mira quinto año! Quinto año y tiene 13 años. ¿Trece, cumpliste ya? ¿Cómo es?, explícanos a ver.
Maryann Hanson: Presentó las pruebas de cuarto y quinto año, todas, toditas, todas integradas.
Presidente Chávez: ¿Cuándo las presentó?
Maryann Hanson: En el mes y medio que tiene aquí en Caracas, Presidente.
Presidente Chávez: ¡Ah! El tiene mes y medio aquí presentando exámenes.
Maryann Hanson: Y
son unos exámenes con unas características muy particulares,
interactivo el examen con los profesores. Inclusive corrigiendo las
preguntas que no estaban bien formuladas.
Presidente Chávez:
Bueno, fíjate lo que sacó. En Inglés: 20. Geografía de Venezuela: 20.
Educación física: 20. Castellano: 20. Matemática: 20. Física: 20.
Química: 20. Ciencias biológicas: 20. De la Tierra: 20. Instrucción
premilitar: 19.
—Risas.
Bueno. Y yo tengo pongo 25, chico, en Premilitar será.
Bueno, ¿dónde firmo yo?
Maryann Hanson: Aquí, Presidente.
Presidente Chávez: ¡Ah! No en las notas. Bueno, yo pedí este honor, firmarle el diploma de Bachiller a Miguel.
—Ovación.
¿Cuándo empiezas clases?
Maryann Hanson: En septiembre.
Presidente Chávez: ¿Dónde vas a estudiar? Gracias, Maryann. ¿En la ULA, en Mérida?
Miguel Alejandro Ramírez: Sí.
Presidente Chávez: Es bueno decir que nosotros tenemos un programa... ¿Cómo se llama el programa, Maryann? Es nuevo.
Maryann Hanson:
Estamos generando un área para la atención integral de los niños
sobresalientes o con aprendizaje rápido, también se denominan así, en la
modalidad de educación especial. Es un proceso de transformación que
hemos consultado en el año 2007-2009, y ahora en el 2012, amplia y
profundamente con todos los actores claves del proceso de la educación
especial.
Presidente Chávez:
Esta es una cosa muy importante, y aquí hay que hacer un esfuerzo
general, digo yo, en todas partes, los maestros de escuela, las madres,
los padres, detectando habilidades, manifestaciones, porque todo niño,
toda niña es un potencial infinito, incalculable de vida, de
habilidades, de capacidades. A veces ahí escondidas. Ahora, si no está
bien alimentado el niño o la niña, si no recibe las oportunidades, a
través de la educación, se queda, se queda por allí, se queda por allí.
Por eso decía, detectar estas habilidades... ¿Vamos a llamarlas cómo? Identificación y caracterización...
Maryann Hanson: De estas necesidades especiales.
Presidente Chávez: ¿Necesidades o habilidades?
Maryann Hanson:
Necesidades especiales, porque las capacidades, la inteligencia es una
potencialidad que tiene que ser desarrollada. Entonces estos niños
presentan unas necesidades, que son especiales, que hay que satisfacer. Y
en ambientes creativos, hay distintas maneras, distintas formas de
atención a estos niños sobresalientes o con aprendizaje rápido.
Presidente Chávez: Correcto.
Maryann Hanson:
Entonces nosotros hemos creado en Venezuela los centros de diagnóstico,
orientación e información, para la diversidad funcional, y hemos creado
una nueva área, que esta área que es muy interesante, bien compleja,
porque esta es una inteligencia compleja, no es el talento, que es una
capacidad específica, sino una complejidad de factores que hacen juego
en un momento determinado y a lo largo de toda la vida de estos niños y
estas niñas, y que también tienen algunos condicionamientos
contextuales, históricos, diferentes aspectos que inciden allí.
Pero
es muy importante que entendamos que es una potencialidad que hay que
desarrollar, y que desde el sistema educativo debemos propulsar,
promover este desarrollo...
Presidente Chávez:
Y hay que saber detectar eso. Yo no tengo el conocimiento pedagógico de
los términos que usa Maryann, que es nuestra ministra de Educación.
Pero
en una ocasión yo le decía a alguien, cuando uno andaba en el deporte,
incursionando en el deporte, hay niños que tú los ves ahí chiquiticos,
que corren pero como un rayo, y que tienen además la conformación física
ya de un atleta. ¡Ah!, pero si tú no lo ves, lo visualizas. Hay otros
que no, es decir, por distintas razones, pues, genética o biológica,
etc. Detectarlos, organizarlos, bueno ayudarlos y orientarlos.
Y ahí está Miguel Cabrera, metió dos jonrones ayer, llegó a 300 jonrones ¿no fue?, Miguel Cabrera.
Así,
para las artes... ¿Dónde está Calzadilla? La música. Que son
habilidades a veces innatas, a veces son innatas. Para la pintura.
Entonces, es importante por eso esa labor educativa, pedagógica, que
comienza en el hogar, en la familia, y luego con la escuela, para ir
caminando juntos —muchachos y muchachas— y juntas, hacia la grandeza.
Ya terminamos, Elías, ¿no? Hicimos los pases, entregamos la Canaima.
¡Ah! Está Francisco Pacheco, que nos va a cantar... Bueno, pero ya eso es cerrando, cerrando el evento.
Maryann Hanson: Pero faltó el reconocimiento.
Presidente Chávez: ¿Ah?
Maryann Hanson: Faltó el reconocimiento a cinco niños de sexto grado que obtuvieron el mejor desempeño estudiantil en el año escolar.
Presidente Chávez: ¿Dónde están esos niños?
Maryann Hanson: Están aquí, Presidente.
Presidente Chávez: ¡Ah! Un reconocimiento a los niños de... a cinco niños.
Maryann Hanson: A cinco niños que se graduaron de sexto grado en este año escolar 2011-2012.
Presidente Chávez: Hay que entregarles también un reconocimiento.
Maryann Hanson: Sí.
Presidente Chávez: Bueno, vamos a entregárselos, pues.
A ver, Enderson Gabriel. Tú vas explicando, Maryann.
Maryann Hanson: Bueno, Enderson tuvo el mejor desempeño estudiantil, es decir el mejor rendimiento académico en sexto grado.
Presidente Chávez: Adrián José.
Maryann Hanson: Pasó para primer año, por supuesto.
Presidente Chávez: ¿Qué grado eres tú, Adrián?
Maryann Hanson: Igualmente sexto grado, pasa a primer año de bachillerato.
Presidente Chávez: Sexto grado. Pasaron a primer año de bachillerato.
—Aplausos.
Maryann Hanson: Son los mejores rendimientos de su estado, Presidente.
Presidente Chávez: Andrich Paola.
Maryann Hanson: Andrich.
Presidente Chávez: (beso) Felicitaciones, Andrich Paola.
—Aplausos.
Andrea José. ¡Andrea José, la poetiza! (beso) Tú pasaste pa’ primer año también. ¡Imagínate tú!
—Aplausos.
Y Maikol Luis.
Maryann Hanson: Y les estamos dando un regalo.
Presidente Chávez: Maikol. Gracias Maikol (beso).
—Aplausos.
Bueno,
muy destacados en quinto año. ¿Más todavía?, nos falta otro... ¿Ah? El
archivo. Elías, ¿qué hora es?, las 2:00 de la tarde. El archivo. ¡Ya!,
¿tienes la carta ahí? ¿Cómo dice?, ¿dónde está?
Pero no hay una pantalla para ver, ¿no? A ver, dale un micrófono al joven que está ahí. ¿Cómo te llamas tú?
Respuesta: Félix Ojeda, Presidente.
Presidente Chávez: Sí, dinos, pues.
Félix Ojeda: Mire,
estuve chequeando en el sistema, nosotros contamos con 12 mil 128
cartas del Libertador. Son muchas cartas, pero como usted sabe,
Presidente, el Libertador tiene muchísima correspondencia, estuvimos
chequeando en el sistema...
Presidente Chávez: Muy breve, por favor, compadre, que estoy angustiado por la hora, tengo que ir al acto de la Marina en Puerto Cabello.
Félix Ojeda: Sí. Y precisamente esa carta todavía no la tenemos, Presidente.
Presidente Chávez: ¿No la consiguieron ahí?
Félix Ojeda: Sí. Pero todavía tenemos otras cartas, por ejemplo la carta que él le escribe a su maestro Simón Rodríguez, otras cartas...
Presidente Chávez:
Okey. Yo les propongo, Calzadilla, que hagamos un evento especial y
ustedes con más calma, y con una pantalla, podamos presentar incluso
parte de las cartas manuscritas por Bolívar. Les propongo eso. ¿Me lo
permiten? Porque son las 2:00 de la tarde, hoy es el Día de la Marina de
Guerra, hay que felicitar a la Marina Venezolana también, 24 de julio
de 1823.
—Aplausos.
Allá
en el Lago de Maracaibo hubo una gran batalla. Los barcos de la Patria
contra los barcos españoles, y les ganamos. Les ganamos la batalla, la
Batalla Naval del Lago de Maracaibo. Un día como hoy. Tremendo
cumpleaños para Bolívar, ¡eh!, 24 de julio.
Ahora,
todo esto, antes de que Pacheco, Francisco Pacheco... ¿Tú naciste en
Capaya también?, ¿ah? En Cata. Bueno, por ahí se llega a Capaya ¿no?.
¡Ah!
Yo no terminé decir lo que dijo Bouteflika, tengo que terminar en 30
segundos. A Bouteflika yo lo estoy invitando en Argelia, le dije:
“Bueno, nos vemos en la Cumbre...”. Y entonces él me dice: “Bueno,
Chávez, nos vemos en Caracas”. Y yo le digo: “No, Bouteflika, la cumbre
no es Caracas, es en Margarita, en la isla de Margarita.
Y entonces él me dice algo muy sabio, me dice: “Para mí todo eso es Caracas...”. Capaya también.
Entonces
basta saber que Bolívar nació aquí en Caracas, un día como hoy, y que
vivirá para siempre todos los días de nuestras vidas y la vida de la
Patria, en toda esta Caracas, en toda esta Venezuela, y más allá en
nuestra América bolivariana.
Bueno,
para que sigamos nosotros, y ustedes, muchachitas, muchachitos; Miguel y
nosotros, todos nosotros, el pueblo venezolano, y sobre todo ustedes
los que están creciendo, el camino de la grandeza, el camino de la
grandeza.
Yo
recordaba a Charles De Gaulle, cuando dijo: “No me imagino a Francia,
sino grande”. Digamos nosotros algo parecido, y digámoslo con Bolívar,
porque tenemos además un compromiso que va en nuestros genes: la lucha
que nunca termina. Nosotros estamos obligados, como hijos de Bolívar,
hijas de Bolívar, a hacer de Venezuela una Patria Grande, y que esta
nuestra Patria contribuya a conformar una Patria mucho más grande, que
es la Patria latinoamericana y caribeña. Es un compromiso que nosotros
tenemos. Es un compromiso supremo de vida. Y es por el camino de la
Revolución socialista que aquí en Venezuela lo venimos logrando y lo
vamos a lograr.
Recuerdo,
para terminar, a José Enrique Rodó, ese gran escritor uruguayo,
hablando de Bolívar: “¡Grande en el pensamiento!, ¡grande en la acción!,
¡grande para magnificar la parte impura que cabe en el alma de los
grandes! Y grande para sobrellevar en el infortunio y en la muerte la
trágica expiación de la grandeza...”. Porque él mismo lo había escrito,
Simón: “Nadie es grande impunemente...”. Por eso Rodó dice: “Grande
incluso para enfrentar, para sobrellevar en la soledad, ante la traición
y frente a la muerte, la trágica expiación de la grandeza...”.
Decimos contigo y con el canto de este pueblo: ¡Que viva Bolívar! ¡Viva Bolívar! Gracias, muchas gracias.
¡Dale, Pacheco!
Viva Venezuela. Canción
—Aplausos.
Presidente Chávez: ¡Ajá! Yo voy a decir un poema, dedicado a ustedes ¿no? ¿Tú eres de Capaya? De por ahí de Capaya son ustedes.
Hay un poema muy bonito: Reláfica de la Negra Hipólita.
Calzadilla, ¿quién escribió eso?
Fiscal Luisa Ortega Díaz: Andrés Eloy Blanco.
Presidente Chávez: ¿Andrés Eloy es? Sí. Yo tengo la duda si es Andrés Eloy. ¿Sí? Pero si lo dice la fiscal general, que además es llanera.
Vengan, por favor, acompáñennos los poderes aquí, las poderosas, perdón.
No, salgamos de cadena, salgamos de cadena ya. Despedimos la cadena.
Fin de la cadena nacional
Presidente Chávez:
La carta que él le escribe a María Antonia, ya él por allá en el Perú,
casi que llegó a Buenos Aires, no le permitieron desde aquí, tú sabes
que Manuel Dorrego, gran bolivariano, amigo de Bolívar, vino a verlo al
Potosí, vino a verlo al Potosí, y a pedirle que fuera a Buenos Aires, y
que allá lo iban a declarar, el pueblo de Buenos Aires, el “protector
del Río de la Plata”.
—Querían que combatiera al imperio brasileño.
¡Claro,
claro! Al imperio, que era portugués, más que brasileño ¿no? Y al
imperio inglés, que amenazaba también y quería tomar el Río de la Plata.
Y Bolívar estaba dispuesto a ir, pero no le dieron permiso en Bogotá,
el Congreso, que ya lo dominaban los antibolivarianos, y él responde y
le dice a Santander: “No me dejan ir a Buenos Aires por falta de
grandeza...”. Y se devolvió, y era pa’ matarlo, ¿ves? Y al final lo
mataron. Y matan a Sucre. Y echan la Patria abajo y se la entregan al
nuevo imperio.
Entonces
Bolívar le escribe a María Antonia y le dice: “María Antonia —entre
tantas cosas que le encomienda— atiende a mi mama Hipólita, que yo no
conocí más madre ni padre que ella...”. Y después cuando él regresa... Y
la otra negra era la Matea, eran varias negras que eran esclavas,
habían sido esclavas, pero fueron sus nodrizas, le dieron pecho al niño
porque su mamá era enferma, y murió a los pocos años; el papá también
estaba enfermo ya, fue el último de los hijos él ¿no?, de los cinco
hijos que tuvieron.
Ahora,
entonces cuando él regresa aquí a Caracas, en el año 27, cuentan los
escribientes del momento, que él venía en una carroza con su uniforme de
gala, y al lado Páez, porque él estaba tratando, él trató hasta el
final de que Páez no se dejara llevar por los enemigos de la Patria. Y
vino a Caracas, y le entregó una espada, su espada, se la dio a Páez,
tratando tú sabes de reconquistar al gran centauro, porque él sabía que
era un hombre muy poderoso Páez, un gran prestigio militar y un guerrero
pues.
Decía
él después en Bucaramanga, decía: “Páez es el hombre más peligroso de
Colombia, porque tiene mucho prestigio, tiene mucha influencia sobre la
tropa, y mucha ambición...”. Y fíjate, terminó, él no pudo, no pudo
conquistarlo para la causa de la independencia y la revolución.
Pero
él venía con Páez en la carroza, y entre la multitud, llegando a la
plaza central para un tedeum en la catedral, él ve a la negra. Y cuentan
que saltó de la carroza, se le cayó la espada y se le tiró en los
brazos a llorar en el pecho a su negra, a su mamá negra.
Entonces Andrés Eloy escribió esto, yo no me la sé muy completica, me faltan algunos, se me ha olvidado alguna parte:
¿Uté ha visto?, ¡Le va a pegá !
¿Y po que le va a pegá ?
¿Po que usted es su mama ?
Esa no es rasón;
Yo también soy su mama;
Su mama somos las dós.
No me le pegue al niño,
Misia Consesión!
Déjemelo maluco,
Déjemelo pegón,
Déjemelo peleón
¿Qué si les pega a los blancos?,
¿que le pega a los negros?,
¿que le pega a los grandes?,
¿qué le pega a tós?
¡ pues, que les pegue, que les pegue,
que les rompa el morro, que les rompa el josíco,
que él tiene razón!.
—Risas.
Que mi niño Simón pelea,
Mi niño Simón é el diablo,
Mi niño Simón é la incorresión de la incorresión...
¡Pero é que uté no ha visto,
é que uté no ha visto como hay gente mala,
en este mundo
mi ama Consesión!
que allá viene lo grande malo,
allá viene lo blanco malo
allá viene lo negro malo,
¡ahí esta él fajao!
y es que tiene justisia pa pone la mano
y é la incorresión de la incorresión...
No me le pegue al niño,
Misia Consesión!
Ese va va a se bueno
Ese va a ese noble, ese va a ser santo
Déjemelo pegón
¡Ese se va a poné flaquito
arriando mandingas con su mandadó!
No me le pegue al niño,
Misia Consesión!
Ese va a sé bueno; ese va sé noble, ese va sé santo....
No me le pegue al niño,
Misia Consesión!
Que es malo, que es pegón
Bueno, pa’ los Palasio, pa los Boliva...
Pero fa a sé santo, pa su mamita lambía.
No me le pegue al niño,
Misia Consesión!
¿Qué la sangre é suya, sí
pero... ¡la leche é mía!
—Risas.
Se me olvidó una parte ahí.
—Risas.
No, muy bueno eso de Bolívar.
Hay otro poema, ese sí me lo sé mejor, de un poeta de mi tierra llanera de Barinas, Alberto Arvelo Torrealba, Por aquí pasó se llama.
Lo que falta es un arpa, pero no hay arpa, no importa.
Por aquí pasó compadre,
hacia aquellos montes lejos.
Por aquí vestido de humo,
mi general que iba ardiendo
Fue un silbo de tierra libre
entre su manta y sus sueños.
Por aquí pasó, comadre,
hacia aquellos montes lejos.
Mírele el rastro en la paja,
míresela compañero,
como las claras garúas
en el terronal reseco,
como en las mesas el pozo,
como en el caño el lucero,
como la garza en el junco,
como en la tarde los vuelos,
como la nieve en el pico,
como en la noche el incendio,
como el cocuyo en el aire,
como la luna en el médano,
como el potro en el Escudo
y el tricolor en el cielo.
Por aquí pasó compadre,
Hacia aquellos montes lejos
Allá va su estampa sola
Grave, perfil aguileño
Arzón de cuero tostado
Tordillo de bravo pecho.
De bandera va su capa,
Su caballo de puntero
Artista labrando pueblos,
Hombre retoñando patrias
Picando glorias, ¡tropero!
Por aquí pasó, compadre,
Hacia aquellos montes lejos.
¡Óiganle! Óiganle la voz tendida,
Sobre el resol de estos médanos
La voz que gritó más hondo,
¡Óigansela compañeros!
Como el son de las guaruras
cuando pasan los arrieros,
como la brisa en la palma,
como el águila en el ceibo,
como el trueno en las lejuras,
como el cuatro en el alero,
como el tiro en el asalto,
como el toro en el rodeo,
como el relincho en el aire,
como el gallo en el silencio,
como el grito del centauro
en las Queseras del Medio,
¡Por aquí pasó Bolívar inmenso
Gallardo, eterno,
Su voz hoy vuelve sobre
este inmenso desierto.
—Aplausos.
Me voy., me voy.
Que original es nuestro Presidente, más Pueblo creo que no puede ser y lo mejor es que está al pendiente de nuestros niños, niñas, adolescentes y jovenes Venezolanos...Gracias a Dios!... Hoy es el Día de su cumpleaños, 58 años de Vida productiva y ahora es cuando, porque Dios lo quiere así...Dios le bendiga Presidente de los Venezolanos
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